Este domingo 4 de marzo la policía y agentes de los servicios de inteligencia marroquíes atacaron a una familia saharaui, en Dajla, territorios ocupados del Sáhara Occidental.
La familia Ehel Gachbar se encontraba en una protesta frente a su casa que había sido ocupada ilegalmente por un colono marroquí cuando las autoridades de ocupación atacaron.
A pesar de las numerosas quejas y denuncias presentadas por la familia Ehel Gachbar, las autoridades ignoraron el caso, dejando el colono, que es funcionario del Estado marroquí, en la casa.
La escalada de violencia contra la población saharaui ha llegado a límites muy preocupantes por la complicidad entre las autoridades y los colonos, cuyo comportamiento es cada vez más agresivo.
Dajla es presentada como una ciudad turística por el estado marroquí. La verdad, sin embargo, es que se trata de una ciudad bajo ocupación y cuya población autóctona se mantiene bajo un régimen de terror.