Fanatismo religioso: Un cáncer maligno para la sociedad

Publicado el 17 diciembre 2019 por Belduque

Nadie lo puede negar, los hechos y las evidencias así lo demuestran. El fanatismo religioso se está convirtiendo en uno de los principales obstáculos para el sano desarrollo de la sociedad misma, pues sus seguidores, apoyados por grupos que promueven ideas de odio contra otros grupos o comunidades, intentan someter bajo sus creencias a toda persona que esté a su alcance. 
Bajo frases de “si no creer respeta” se escudan, pero ellos no hacen el más mínimo intento por respetar las ideas ni la vida de los demás. Un ejemplo de ello, el nuevo ataque su sufrió el monumento “Sincretismo” en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, a manos de miembros de un grupo religioso, quienes lo taparon con una manta de la Virgen de Guadalupe y exigiendo que sea quitada de su lugar.
Estos grupos de odio deben de ser más vigilados por las autoridades mismas, pues en cualquier momento su actividad podría escalar a cosas más graves. Se dice que lo más peligroso que hay en el mundo es un imbécil con iniciativa, y la historia humana más reciente así nos lo ha confirmado con ataques de gente ignorante e inculta en contra de personas que pertenecen a comunidades ajenas a ellos.
Recordemos que la fe cristiana fue impuesta a fuego y acero, especialmente en América, lo que contradice su discurso inicial de amor y paz, pero ahora pareciera que algunos grupos están intentando volver a este tipo de actos, censurando y atacando a todo aquello que está en contra de sus creencias, incluso si tienen que pasar por encima de los derechos humanos de las demás personas.
En varias ciudades de México, y del mundo, este tipo de grupos se han mantenido en contra del aborto o los matrimonios igualitarios, cuando no existe ningún argumento real, ni científico, para impedirlos. Solo se basan en su desprecio a lo que está fuera de su círculo de creencias, el cual no toleran que una persona de mente libre ponga en duda o cuestione. Y ahora sacan ese atropello llamado “objeción de conciencia” para negarle el servicio médico cuando alguien lo requiera si lo que le pidan va contra las creencias del “médico”. 
Recordemos que toda religión solo es mitología sobreestimada, pues necesita que alguien se la crea para que sea “cierta”. De todos los libros religiosos, menos de un 20% es lo que realmente importa o aporta algo de bien a la sociedad. Lo demás solo es más mitología que muchos manipulan y tergiversan a su antojo para aprovecharse de los demás y hacer creer a otros que ellos son superiores a otros.
Hace tiempo el entomólogo estadounidense Edward Osborne Wilson, quien fue ganador del Premio Crafoord, dijo para la revista NewScientist, en el artículo "Religious faith is dragging us down", en donde habló de su libro "The meaning of human existence", tratando este tema, él mencionó que “Las religiones en particular presentan elementos sobrenaturales que otras tribus, otras religiones, no pueden aceptar. Y cada tribu, sin importar cuán generosa, benigna, amorosa y caritativa, desprecia a todas las demás tribus. Lo que nos está arrastrando hacia abajo es la fe religiosa”.
Y finalmente comentó “Por el bien del progreso humano, lo mejor que podríamos hacer sería disminuir, hasta el punto de eliminar, las creencias religiosas. Pero ciertamente no eliminar los anhelos naturales de nuestra especie o hacer estas grandes preguntas”. 
Como lo dijo en su momento el filósofo español Roberto Augusto, "Es difícil dialogar con un creyente porque sus creencias no se basan en razones, sino en la aceptación de ideas dogmáticas".
Y eso lo hemos constatado en innumerables ocasiones, los religiosos fanáticos solo quieren “amar” al prójimo si aquel cree en sus mismas creencias, pero si no, lo atacarán y condenarán con todas sus fuerzas y medios posibles. El mayor acto de soberbia (el pecado original) y más básico de todos los fanáticos religiosos, es auto-engañarse para creer que ellos tienen la fe correcta y que solo ellos conocen “la palabra de dios”.
Si existiera su dios, estaría avergonzado de ellos. Recuerda que tu fe o tus creencias no te dan ningún derecho a impedir que los demás vivan su vida como a ellos les plazca, no tienes ningún derecho a impedir que aborten si ellos lo consideran necesario, o que se unan en matrimonio o que adopten niños si están en la posibilidad.
Los fanáticos religiosos y miembros de grupos de odio religioso no quieren saber la realidad, solo quieren creer que tienen la razón, pero no es así, viven en una mentira, son la vergüenza de su dios, son su cáncer maligno que terminará eliminando de la humanidad eso que llaman “su fe”, pues no se puede predicar amor con actos e ideologías de odio. 
Nadie tiene porque respetar una fe que se basa en el odio y el desprecio a los demás. Sus mandamientos hablan de amor, pero sus actos gritan odio, ahí refutan toda su fe y creencias con ese simple acto de odio a los demás. 
Si quieres tolerancia y comprensión, comienza tú por practicarla con los demás. No siembres odio y quieras cosechar amor, pues si lo haces, lo que tendrás es rencor y venganza de quienes atacaste.
http://twitter.com/belduque
https://www.facebook.com/BelduqueOriginal/