En esa forma lenta de morir periodísticamente transcurren una serie de fases que pueden ser tal que así...
1. LA DUDA: Llega el primer equipo de periodistas. No hay nadie y en lugar de pensar que eres el primero, piensas que te has equivocado de sitio.
2. EL ALIVIO: Llegada de un segundo equipo. Se confirma que ese es el lugar o que al menos no eres el único que la ha cagado.
3. LA COMPETICIÓN: A medida que van llegando más y más periodistas la pregunta que más se repite es... ¿y vosotros desde que hora lleváis aquí? Sin lógica alguna gana el que lleva más tiempo.
4. EL EXAMEN: Los periodistas empiezan a repasar los datos de la noticia como si nos fuéramos a examinar del tema. ¿Qué declaró la última vez? ¿Cuándo ingresó? ¿Quién está lesionado?
5. LA FAMILIA: Los periodistas pasan de la noticia. Hablan de sus cosas como si estuvieran en un bar ¿Cómo te va? Pues ya ves... ¿Buscaste ya piso? Que va, sigo viviendo en la calle... Que bien ¿no?
6. LA NOSTALGIA: Recuerdos de otras guardias, comparativas (puff, aquella si que fue larga), anécdotas (¿te acuerdas de aquella vez?)... Si hay becarios de por medio las batallitas pueden hacerse eternas.
7. ENSALZAMIENTO DE LA AMISTAD: Al fuego de la nostalgia se empiezan a organizar quedadas para el fin de semana que pocas veces se cumplen.
8. LA GRACIA: Alguien finge que ya llega a quien se está esperando. Todos se echan la cámara al hombro corren sin rumbo y al darse cuenta de que es mentira se ríen por fuera y le maldicen por dentro (no demasiado porque todos lo hemos hecho una o unas cuantas veces).
9. EL SILENCIO: Después de horas hablando de lo humano y lo divino la gente se empieza a dispersar en busca de su propio espacio. Repasa en la cabeza los datos si tiene directo, llaman por teléfono a sus seres queridos...
10. EL FINAL: Llega el momento de grabar... Ya no hay nostalgia, ni ensalzamiento de la amistad; no hay quedadas para el fin de semana, ni bromas de compañeros... Después de horas juntos, diez segundos de grabación nos separan en un sálvese quien pueda que todos conocemos y de alguna manera aceptamos... La próxima guardia volveremos a reírnos juntos. Así es nuestro trabajo.