¡Qué pena que febrero sea un mes tan corto! Con lo que nos gusta darnos mimitos durante sus días. Mimitos físicos... y literarios, porque un año más Libros que hay que leer hace una llamada general para que leamos historias románticas (o que tengan su dosis de amor) en estos días (tienes las bases aquí, con un sorteo inicial que a lo mejor te interesa). Ella no falta a su cita y yo tampoco lo hago. Sobre todo porque tengo varios libros amorosos diversos pendientes por leer. Espero que me dé tiempo a leerlos todos, reseñarlos y enlazarlos a continuación. Nos seguimos leyendo.
¡Qué pena que febrero sea un mes tan corto! Con lo que nos gusta darnos mimitos durante sus días. Mimitos físicos... y literarios, porque un año más Libros que hay que leer hace una llamada general para que leamos historias románticas (o que tengan su dosis de amor) en estos días (tienes las bases aquí, con un sorteo inicial que a lo mejor te interesa). Ella no falta a su cita y yo tampoco lo hago. Sobre todo porque tengo varios libros amorosos diversos pendientes por leer. Espero que me dé tiempo a leerlos todos, reseñarlos y enlazarlos a continuación. Nos seguimos leyendo.