viveLibro: Tu última obra literaria fue Cartas a papá, ¿qué podemos esperar de Las mentiras del hambre? ¿Algo parecido o totalmente distinto?
Feiny Encima: Sí, tienen algo en común, los dos son libros que abordan el problema de una enfermedad sufridas en el seno familiar. Si en Cartas a papá trataba de mi relación con mi padre, víctima del alzheimer, en Las mentiras del hambre el problema es la anorexia, cómo se vive y como se lucha contra ella. Los dos son libros muy personales, ya que narro hechos que me afectan personalmente y de los que, por ello, tengo lamentablemente experiencias que considero puede ser muy útil compartir con los lectores. Son historias llenas de emoción y a la vez de enorme esperanza.
(V): Si tuvieras que describirte como escritora en una sola frase, ¿cuál sería?
(FE): Necesito sentir lo que escribo y comunicar lo que siento.
(V): La tarea de escribir un libro, ¿es inspiración o transpiración? ¿Cuál de las dos habilidades es más importante a la hora de construir una novela?
(FE): Un libro se escribe con inspiración y transpiración. En mi caso no es posible escribir una novela sin ambas; cuando escribo un libro tengo que estar inspirada y que brote por cada poro de mi piel cada situación.
(V): ¿Puedes contarnos alguna anécdota divertida del proceso de creación de Las mentiras del hambre?
(FE): Sí claro. Cuando llevaba avanzado el libro fui a visitar a mi padre, y me llevé el ordenador en el que estaba escribiéndolo. Sin darse cuenta dirigió su brazo hacia el teclado y de golpe se borraron 100 páginas, de las que no tenía copia. Afortunadamente pude recuperarlas.
(V): ¿Tienes alguna manía a la hora de escribir?
(FE): Mi bolígrafo talismán regalo de mi mejor amiga y una cafetera bien cargadita hasta arriba.
(V): ¿Qué te depara el futuro? ¿Estás trabajando en alguna novela nueva?
(FE): Ojalá yo supiera lo que me depara el futuro, pero, por supuesto que ya tengo en mente una nueva novela.