De vez en cuando veo una peli de éstas de aventuras en el bosque y me planteo fugazmente comprarme unas botas de montaña y una tienda de campaña. Luego me acuerdo de que no tengo ni sentido de la orientación ni resistencia física ninguna y se me pasa un poco.
El caso es que he visto Felicidad para principiantes; os cuento:
Helen (Ellie Kemper) se acaba de divorciar y quiere pasar página y seguir con su vida, así que se apunta a un viaje con un grupo de senderismo para principiantes con la idea de pensar durante muchas horas y recuperar un poco de perspectiva. El problema es que el viaje a) no es para principiantes en absoluto y b) no es un sitio para pensar tampoco porque apuntados hay otros seis senderistas (y un instructor) incluyendo a Jake, el mejor amigo del hermano pequeño de Helen, que está enamorado de ella hasta las trancas y a quien ella no puede ni ver, no se sabe muy bien por qué.
Ya sé que suena a la misma comedia romántica básica y predecible que habéis visto cincuenta veces -yo encantada, también os digo-, pero ésta es tan cuqui; el grupo es súper majo, todos los personajes completan la historia a su manera sin quitar protagonismo a la relación entre Helen y Jake, y la sensación campamento-de-verano que todos echamos de menos de cuando éramos pequeños está muy bien capturada.
Aunque algunas cosas son mejorables: Jake tiene un par de detalles de acosador que son tolerables solo porque esto es una peli y porque el personaje es guapo, y la manía que le tiene Helen a este hombre no se llega a explicar nunca -porque no tiene sentido, creo-, así que a ratos la tensión entre ellos resulta un poco forzada. Pero son aspectos ignorables que no hacen que la película sea menos entretenida.
En resumen, Felicidad para principiantes tiene todos los elementos de una comedia romántica pero con un extra de amabilidad y optimismo que me ha puesto de buen humor pero también me ha hecho pensar en lo difícil que es mantener conexiones con gente incluso cuando has compartido con ellos experiencias que te han cambiado la vida. Recomendada.
Si la queréis ver, está en Netflix.
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