Para que llegue el Baltic Pride se Riga, primero tenemos que disfrutar del Europride de Marsella de 2013 y el de Oslo en 2014, pero no debemos olvidar la actual y real situación del colectivo LGTB en los países de la antigua Unión Soviética.
Actualmente Rusia se ha convertido en el centro de todas las miradas del colectivo LGTB y simpatizantes de los derechos humanos por las medidas tan radicales que se están tomando en contra de la libertad y la dignidad de las personas, actuando incluso de manera desmesurada, tal y como lo han demostrado con la Pussy Riot. Hace pocas semanas, el Gobierno de Putin, prohibía durante los próximos 100 años la celebración del Orgullo LGTB en Rusia, y por si fuera poco se ha censurado, en cualquier medio de comunicación, la utilización de palabras como homosexual o gay.
Esperemos que Letonia demuestre el respeto que las personas LGTB nos merecemos, y pronto se convierta en otro país más en reconocer los derechos totales del colectivo LGTB, porque nuestros derechos, también son humanos.
¡Enhorabuena, Riga. Nos vemos en 2015!