El acta fraguada de detención, las falsas informaciones de que Felipe no ha sido nunca detenido, son sólo un ejemplo, un terrible ejemplo, de lo que es la estructura de la oligarquía.Pero ahí quedan al desnudo.Si nadie hubiese cerrado sus puños por Vallese, todos seríamos cómplices. Efectivamente. Y en ese punto nodal de carne y hueso, en ese hombre peronista que era Felipe, se desencadena todo el drama de un pueblo en guerra por su liberación. Una guerra que no tiene características externas de las que conocemos en los manuales extranjeros. Aquí no hay ejércitos de ocupación que hablen idiomas extranjeros. Aquí hay una minoría que domina a sus títeres por el miedo y la recompensa, y los lanza contra sus propios compatriotas.Felipe desnuda al neo colonialismo en la Argentina.Su muerte nos permite identificar al enemigo, que no es este fiorillo o este medone contingente, sino un complejo conjunto de relaciones que produce fiorillos y medones sin solución de continuidad.Es en la lucha por la búsqueda de la verdad de Felipe, que adquiere sentido de lucha permanente de las masas contra las minorías del vasallaje.Como los viejos caudillos montoneros de la Patria Grande, nuestros montoneros de hoy, nuestros descamisados, se reconocen en cualquiera de los suyos, asumen sus ideales colectivos. No elevan funerales póstumos de recordación: convierten a sus muertos en banderas de liberación contra el Sistema.Vallese muere en las ruinas de un Sistema liberal que se derrumba, pero resurgirá una y otra vez, como aquellos viejos caudillos, cuando la bandera de la Patria liberada flamee definitivamente en nuestra grande Argentina.Felipe Vallese quería ver esa Patria. El Sistema se lo impidió. Ya no está con nosotros. Pero, nosotros estamos con él. Luchamos para destruir todo aquello que Felipe descubrió en las trágicas noches de agosto de 1962.Varios años han pasado. "El enigma" Vallese está ya resuelto: no hay terceros caminos. O con Vallese o con los torturadores. O con el Pueblo o con el Sistema. Nadie, realmente, puede ignorar lo ocurrido, salvo que quiera constituirse conscientemente en complice.El asesinato de Felipe Vallese, de "proceso al Sistema" se convierte así, por la acción del pueblo, en "clave para patriotas".Clave de un destino nacional, del cual Felipe, será siempre mártir y símbolo.
*fragmento del libro "Felipe Vallese. Proceso al Sistema" de Rodolfo Ortega Peña y Eduardo L. Duhalde (Sudestada, 1967)