Hoy día 31 de diciembre corresponde al último día del año, y hay que celebrarlo como la situación merece.
Si meditamos con cabeza fría (y un buen té para templarla), cada año que se inicia es un nuevo aprendizaje y se percibe al finalizar con 12 nuevas notas endulzadas y achampanadas, que lo acontecido ya forma parte de un pasado que quedó pisado, dejándonos vislumbrar un nuevo año que parece diferente de lo vivido.
Los más jóvenes de la casa piden por un nuevo año para seguir creciendo, aprobar sus exámenes de estudio y también de vida, y de paso, piden para que sus pagas mensuales suban por encima del IPC que probablemente no percibirán sus mayores.
La madurez trae consigo otros cambios: más aferramiento a la vida y a su disfrute, donde la salud es su principal protagonista, el amor forma parte del elenco y los actores son el reparto de "los dineros".
El amor, el dinero, la salud… siempre son importantes y ayudan a la Felicidad, pero ésta también llega a producirse sin necesidad de las otras tres.
Lo bonito es centrar nuestros esfuerzos por ser felices, más allá de reglas predispuestas. No es más feliz el que más tiene, sino el que menos necesita.
El Enviado del 74 te desea una buena salida y entrada de año 2023, y que más allá de buenos consejos, recordemos que la ansiada paz y armonía surgen de nuestros corazones.
El Enviado del 74 te da las gracias un año más. Feliz Navidad a todos.