Femmes fatales en el cine negro

Publicado el 16 agosto 2011 por Losplatoscomoojos @platoscomoojos

Dentro del denominado cine negro, hay un personaje al que se concede una mención especial, el de la 'Femme fatal'. Mujeres maliciosas, inteligentes y peligrosas, que dominan a los hombres con sus artes de seducción. Su mirada, y el hechizo de sus gestos, o caricias, son suficientes para hacerlos caer en la tentación. Ellas, altivas y feroces, raras veces se acercan a sus presas, mientras ellos, inconscientes e impulsivos, aún sabiendo de su error, caminan directos a su perdición. 
Por otra parte, su surgimiento como arquetipo femenino, hay que relacionarlo de manera directa con dos cuestiones: 
1)  Los cambios producidos en la sociedad norteamericana tras la Segunda Guerra Mundial, los cuales, provocaron un punto de inflexión en el proceso de emancipación económica e incorporación laboral de la mujer en EEUU. Hecho que, extrapolado al cine, coincide con el auge, relevancia y protagonismo que se le comienza a otorgar en el género negro.
2) El imperecedero planteamiento novelado en torno a personajes turbios y ambiguos, encaja perfectamente con la vigente idea del posible dominio de una mujer con nueva independencia y ambición económica, que comienza a dirigir, en un anterior mundo sólo de varones. Ahora son libres, autónomas y no responden a  ninguna disciplina patriarcal. De ahí subyace, en gran medida y en consonancia con la reinante mentalidad machista de la época, el necesario castigo final recibido por su personaje.
En este sentido, su presencia introduce un novedoso estereotipo de mujer, que rompe esquemas y se sale de la norma. Ellas están al margen de la sumisión, no responden ante la tradición, y su rebeldía tiene que ser sentenciada en la pantalla. En consecuencia su naturaleza femenina se presenta como el origen de la maldad, una malicia que debe ser aplacada generando en el espectador una cierta misoginia social. Son diabólicas, retorcidas y enigmáticas, que no contemplan el matrimonio, ni la fidelidad marital, son dibujadas como un enemigo potencial destinado a desplazar al marido de su entorno familiar. Viudas negras o mantis religiosas en el mundo animal cuyo perfil las aleja del resto de los personajes femeninos, copias enmohecidas, o a veces sórdidas y endebles, de sus maquiavélicas y morbosas antagonistas.
Gran cantidad de actrices les dieron vida, y su rostros son comunes a las grandes películas negras de las décadas 40 y 50. Aquí una pequeña recopilación de las más relevantes:
* En Forajidos (The Killers) de Robert Siodmak, 1946: Ava Gadner


* En Perdición (Double Idemnity) de Billy Wilder, 1944: Barbara Stanwyck


* En La Dama de Shangai (The Lady from Shangai) de Orson Welles, 1948; y en Gilda de Charles Vidor, 1946: Rita Hayworth 


* En El cartero siempre llama dos veces (The postman always rings twice) de Tay Garnett, 1946: Lana Turner


* En Cara de ángel (Angel face) de Otto Preminger, 1952: Jean Simmons


* En Retorno al pasado (Out of the past) de Jacques Tourneur, 1947: Jane Greer.


* En La mujer del cuadro (The woman in the windows) de Fritz lang, 1944:  Joan Bennett


* En El abrazo de la muerte (Criss Cross) de Robert Siodmack, 1948: Yvonne de Carlo