El excelente actor Antonio de la Torre da todo lo que su potencial le permite incluso cuando la película que está realizando no le guste. En Invasor incluso su actuación se resiente, ya sea porque el director no consigue una buena dirección de actores o porque el actor no consigue la motivación suficiente. Desde el inicio nos topamos con escenas de acción con cámara al hombro, y además llevadas de la peor forma posible. El montaje es absolutamente confuso, es casi imposible seguir el hilo e incluso se carga algunas persecuciones interesantes hacia el final de la película.
La fotografía está muy saturada, y no tarda en cansar a la vista. El maniqueísmo de algunos personajes es tan burdo que resulta ridículo. Y no es lo único del guión que no encaja, prácticamente la trama completa se sustenta sobre unas cuantas ideas sacadas de quicio, y llevadas hacia delante de una forma tan tosca que el film entero resulta increíble. A parte de Antonio de la Torre, y puede que también Sofía Oria, el resto de los actores están sosísimos en sus respectivos papeles. Karra Elejalde, que sí que es capaz de dar algunas muy buenas interpretaciones, en esta película está completamente ridículo, consiguiendo incluso arrancar carcajadas en su escena final con sus repetitivos "no te creo".
El guión es muy deficiente, pero la dirección es lo que termina de agriar por completo este intento de thriller a la americana.