Festival de San Sebastián 2012: 'Lo Imposible' anega de emoción el Zinemaldi

Publicado el 28 septiembre 2012 por Lapalomitamecanica
Y Penélope Cruz hace el ridículo con la tragedia Volver a Nacer

Parecía que habíamos entrado en las horas más bajas del Festival hasta ayer. Tras dos días flotando a la deriva entre la indiferencia absoluta y la vergüenza ajena que generaron algunas proyecciones, parece que hemos conseguido salir del cataclismo que nos han traído decepcionantes filmes como Volver a Nacer (Venuto al Mondo), con una Penélope Cruz cuya impecable presencia en la alfombra roja no ha servido para paliar el terrible daño que ha causado la película de Sergio Castellito. Afortunada y paradójicamente, un tsunami ha vuelto a encauzarnos el río para sumergirnos de pleno en el verdadero séptimo arte, para que de nuevo aplaudamos intensamente en los títulos de crédito finales. Esa salvación no ha sido otra que la impactante obra del patrio Juan Antonio Bayona, que con Lo Imposible nos ha dejado claro de qué ibérico está hecho, pata negra. No era la única sorpresa, ya que los brillantes Tommy Lee Jones y Meryl Streep nos hicieron pasar un rato de lo más agradable confesando sus intimidades sexuales bajo la divertida terapia de Steve Carel en
Si quieres enterarte de lo que ha pasado en la séptima jornada de la 60 edición del Festival de Cine de San Sebastián, no tienes más que clickar en el salto.

Como decíamos, ha sido alcanzar la recta intermedia del Zinemaldi y desinflarse como la muñeca hinchable de Espinete en su primer uso. El más sonado fracaso el de la Pe, que aunque se ha acercado a la ciudad donostiarra finalmente, quizás y tras visionar el despropósito que protagoniza junto a Emile Hirsch hubiera sido mejor que se quedara en su casa, y eso que el cachondeo en la sala al menos estuvo asegurado, pero eh, que Venuto al Mondo es un drama y no era risa precisamente lo que debía transmitir, una cagada que por llevar consigo el revoloteo de la mosca española se ha hecho un hueco en la Sección Oficial.
Algo mejor le fue a Monica Belucci, el "servicio mínimo" del Zinemaldi durante la jornada de huelga. La actriz se empeñó en venir aún a pesar de la situación para presentar Rhino Season, del realizador turco Bahman Ghobadi, ganador de dos Conchas de Oro por Las Tortugas También Vuelan y Half Moon. Esta vez, en Rhino Season nos cuenta la historia de un poeta kurdo-iraní que después de pasar 30 añazos en prisión es liberado y trata de reunirse con su esposa, que lo cree muerto. Belucci está sencillamente espectacular, pero el film es un poco marciano, con símbolos incomprensibles por gran parte de la audiencia. A pesar de ello, el metraje es una oda visual.

Pero vayamos a la cremita, porque la verdadera protagonista de ayer fue Lo Imposible. La película de Juan Antonio Bayona emocionó al público y a la prensa especializada con la terrible experiencia real de una familia española que vive de primera mano el desastre acontecido en 2004 en Tailandia, el tsunami que arrasó hasta las almas de los presentes. Nadie duda del buen hacer de Ewan McGregor en la película, pero es innegable que los verdaderos protagonistas del filme son Naomi Watts y, sobre todo, Tom Holland, recordado por Billy Elliot y que en esta ocasión sigue demostrando que es todo un niño prodigio en su arte. Bayona logra así crear uno de los mejores filmes de desastres de los últimos tiempos, alejado del blockbuster convencional y más cercano al telefilm, algo que extraña y funciona a partes iguales.
Con una fotografía impecable, el catalán se posiciona con Lo Imposible, que costó 30 millones de euros, financiación que él mismo admitió en rueda de prensa que no hubiera podido lograr con intérpretes españoles, en el pódium de los grandes directores del panorama nacional.

La compareciencia ante los medios del equipo de la cinta se inició con un discursito de Vasile, dueño y señor de 'Telecirco' y productor del filme, defendiendo la capacidad del cine español, que puede competir con el llegado de Hollywood, donde se manejan grandes presupuestos como es el caso de la obra de Bayona, pero claro, no hay más que ir a la ficha para comprobar que USA financia mucha parte de este metraje, lo cual quiere decir que tampoco se libra de mestizaje. Asimismo, Ewan McGregor defendió la nacionalidad del filme. "Ésta es una película española. Yo la siento así y es bueno que represente al cine español en un mercado más amplio", aseguró y lo cierto es que nadie le quita la razón ni cuestiona su trabajo, Naomi y él lucen perfectos, sólo que al fin y al cabo, su presencia encarnando a una pareja española es cuestión de números, y si no que se lo pregunten a los tiburones de la industria.
No pudieron haber elegido mejor pareja para aliviar las tensiones generadas por el drama de Bayona que Tommy Lee Jones y Meryl Streep, que en Hope Springs y como veteranas leyendas que son en el oficio, sonsacaron numerosas carcajadas a los asistentes gracias a sus magníficas actuaciones en la piel de un matrimonio que tras 30 añazos casados ha perdido el romanticismo, el sexo y la comunicación y que decide acudir a la terapia de un famoso asesor matrimonial con el rostro de Steve Carell. Una comedia dirigida por David Frankel tierna, divertida y natural como la vida misma en la que Lee Jones y Streep son la peli, y punto.

Hoy tendremos la oportunidad de evaluar el debut en la dirección de Dustin Hoffman con Quartet, sobre unos internos en una residencia para cantantes de ópera retirados que cada año organizan un concierto en el cumpleaños de Verdi. La llegada de la ex-mujer de uno de los internos creará conflictos.
No sólo eso, el interés también se centrará en The Hypnotist, del realizador de Las Normas de la Casa de la Sidra, Chocolat y, más recientemente, Salmon Fishing in the Yemen, Lasse Hallström, que esta vez relata la colaboración entre un comisario policial y un hipnotista para cazar al autor de una salvaje matanza.
Mañana el Festival echa la persiana, pero nos iremos convencidos de una cosa: este Zinemaldi es uno de los mejores que se ha vivido en los 60 años de su existencia. Ahora sólo falta que estemos de acuerdo con el palmarés.