Voy a contarte cómo viví el Festival Rock and Roll Delibes que se celebró el 15 de septiembre en el Centro Cultural Miguel Delibes de mi Valladolid, todo un reto para la organización (Ehmad, Teresa y Maguil) poner en marcha un evento de 6 horas de Rock en unas instalaciones emblemáticas -consideradas templo de la música clásica a nivel nacional e internacional- en una ciudad como la mía (es muy complicado aquí poner en marcha algo nuevo, y si se trata de Rock o música alternativa en general más).Como se han producido comentarios sobre mi participación en el Festival Rock And Roll Delibes al tratarse de un evento con 6 bandas sin presencia femenina, y yo estoy involucrada a tope con la visibilización de la mujer (realicé este año censo de bandas con integrantes femeninas que cuenta ahora con 704 opciones, puede verlo AQUÍ, y dirijo la sección bimensual RIOT GIRL en el programa de culto BANDERA NEGRA de Radio 3 Extra, escucha AQUÍ), quiero dejar claro qué me llevó a formar parte.Empiezo por decir que me llamaron una semana antes de que se realizara el evento. A la organización les había llegado mi nombre recomendado (gracias, Miguel Saeta, por ello), y es que necesitaban solucionar de alguna manera esa nula presencia femenina que sí habían intentado cuidar, pero que por motivos de agenda de las bandas y solista con las que habían contactado fue imposible incluir en cartel. Y a esto hay que sumar dificultades como cerrar un cartel en poco tiempo si no querían ver peligrar la celebración del proyecto en aquella pedazo Sala Experimental del Miguel Delibes...¿POR QUÉ ME INVOLUCRÉ PRESENTANDO EL FESTIVAL ROCK AND ROLL DELIBES?Primero porque me gusta apoyar iniciativas como esta, más en una ciudad tan jodidamente complicada como es mi Valladolid a la hora de poner en marcha proyectos (y más aún cuando son ligados a la música alternativa...).Segundo porque desde la organización me dejaron claro que eran conscientes de todo lo concerniente a la nula presencia femenina en el cartel, contándome al detalle todas y cada una de las trabas que se habían encontrado en su intento de cuidar esta parte: me gusta conocer estos datos que, obviamente, no se van a poner en redes sociales ni en el propio cartel pero sí que permiten comprobar si hubo o no claras intenciones de trabajar sinceramente la equidad y en este caso me quedó claro que sí. Así que este artículo a modo de crónica del evento sirve también para que se conozca mejor esta parte de entresijos organizativos.
Y tercero porque el hecho de que se me brindase esta oportunidad en mi ciudad (que hasta este año desde 2010, la verdad, lo de que nadie es profeta en su tierra se había cumplido), en un espacio como es La Sala Experimental del Miguel Delibes, con un equipo tan profesional a todos los niveles, con una organización entusiasta y creyendo en el proyecto, y unas bandas dentro de la amplitud del Rock y de calidad que quisieron formar parte del evento en su primera edición (con el riesgo que siempre conlleva una primera edición en todo) se merecían mi apoyo como persona que siempre estoy apostando por defender el Rock, Metal y Punk sin limitaciones desde hace años.¿CÓMO FUE EL FESTIVAL ROCK AND ROLL VALLADOLID?Para contarte cómo fue aquella noche debo ser sincera y decirte que no podré contarte cómo fue el festival porque, en realidad, voy a explicarte cómo lo viví: lo disfruté tantísimo que por ese motivo he tenido que dejar pasar semanas de por medio y esperar a que mi emoción por la cita fuera decreciendo para abordar este texto con más coherencia y menos sentimiento...¡Pero qué narices! ¡A la mierda protocolos para hacer una crónica si la noche se dio bien y hubo disfrute de por medio!, ¿no? Estamos tan acostumbrados a redactar por inercia que cuando podemos escribir por impulso nos frenamos, y no quiero hacerlo porque este Festival Rock and Roll Valladolid fue un punto de inflexión en la ciudad, en el Centro Cultural Miguel Delibes y -probablemente- en mi carrera profesional: ¿se merece o no contarlo con emoción y entusiasmo?Así que procedo a contarte la cita, que arrancaba con media hora de retraso pero con muchos nervios e ilusión por mi parte...ASÍ VIVÍ EL FESTIVAL ROCK AND ROLL VALLADOLID: A las 17.30h llegaba al Centro Cultural Miguel Delibes, y recorriendo los pasillos del Backstage hasta dar con la zona lateral del escenario ya se respiraban esos nervios propios de citas esperadas pero inciertas por tratarse de primeras ediciones.A las 18h me comentaban que se iba a esperar media hora y a las 18.30h tendría que subir al escenario a presentar la cita y la primera actuación. El corazón me iba a mil por hora pero lo tenía preparado lo suficiente (la tarde anterior había subido ya al escenario a hacer prueba de sonido y me sentí muy cómoda), así que respiré profundo, hablé con varios músicos que estaban ultimando detalles, nos pusimos de acuerdo los técnicos de sonido y yo para saber cuándo subir tras cada actuación y demás detalles necesarios para que el evento fluyera sin contratiempos (¡qué equipo técnico más majo! Me ayudaron infinito, personas encantadoras) y llegó el ansiado momento...
«¡Buenas tardes, queridos inquietos y queridas inquietas, acercaros al escenario que va a comenzar la primera edición del Festival Rock and Roll Delibes y tengo muchas cosas que contaros». Y así, sin más, me relajé, expliqué en qué iba a consistir aquella velada de 6 horas, aporté razones por las que no había mujeres en el cartel, reclamé más presencia femenina de cara a siguientes ediciones (repetido en varias ocasiones más a lo largo de la tarde-noche) y presenté formalmente a los encargados de arrancar la velada: INDIEVERSOS.LAS ACTUACIONES EN EL FESTIVAL ROCK AND ROLL VALLADOLID:A las 18.30h INDIEVERSOS arrancaban oficialmente la cita. Su música, muy recomendada para quienes están familiarizados con el sonido Indie español, seguro que disfrutaron de ellos.
Trabajan versiones de bandas míticas dentro del circuito del Indie patrio, y a lo largo de los 40 minutos que duró su repertorio se pudo apreciar a l@s presentes entregad@s, moviéndose con timidez pero atent@s a aquel ejercicio musical defendido con un sonido compacto y energía por parte del frontman.Cambio rápido de instrumentos, comprobaciones técnicas y de nuevo subí al escenario a eso de las 19.30h para presentar a FRACCIÓN DDP, una banda con una historia muy curiosa e intensa detrás del alma máter Fran Zin: hacía más de 30 años que habían preparado el material que presentaban en directo 3 décadas después, con nueva formación pero mismo origen y sentir compositivo afín al sonido de la movida de los '80.
Su actuación se tradujo en un puente generacional y sonoro con el que nos hicieron viajar a su pasado en nuestro presente. La voz, quizá embargada por la emoción, resultó ser un elemento destacando sin mesura a lo largo de la actuación, afrontada por todos los integrantes con solemnidad y pasión.La propuesta de FRACCIÓN DDP, anclada en otra década a nivel compositivo y quizá chocó por ello con el resto de oferta musical de la velada en concepto, aunque para mentes/orejas abiertas como las mías no supuso un problema.Lo que sí nos quedó claro es que el directo fue defendido con pasión y cuidado al detalle, de hecho no faltaron sorpresas para enfatizar momentos más intimistas: dos violonchelistas acompañaron a Fran en una canción acústica que dejó huella en el público. 
Y tras otros 40 minutos de actuación llegó el siguiente cambio de instrumentos y la nueva actuación a presentar: THE DEAD FRIENDS. A las 20.30h aproximadamente me daban la señal para subir con el micrófono en mano y presentar formalmente a una banda con frontman enérgico y entregado en la interpretación.
Ehmad, que a nivel profesional es músico formando parte de la orquesta sinfónica del Centro Cultural Miguel Delibes, muestra su lado más salvaje cuando se sube al escenario con esta enérgica banda de Rock.Hunden sus raíces compositivas en planteamientos alternativos propios de la década de los ´90, detectando a lo largo del repertorio un alto contenido de distorsiones en las líneas instrumentales a caballo entre el sonido Palm Desert, Noise Rock, Grunge y Post Punk -incluso-, a lo que se debe sumar los guiños evidentes al Hardcore en la interpretación vocal. 
Terminaron sobre las 21.15h y tras las pertinentes comprobaciones instrumentales y mi presentación correspondiente subieron al escenario en torno a las 21.40h PELAJUS, sin duda uno de los toques más rockeros de la noche.Impecables a nivel sonoro e interpretativo reforzaron con ello aún más, si cabe, el Rock & Roll clásico que defienden.
A través de una presencia sobre el escenario muy compacta debo destacar la ejecución de cada integrante, disfrutando y haciéndonos disfrutar a quienes apostaron por una primera edición del Festival Rock and Roll Valladolid que ya había pasado el ecuador de la cita. 
A las 22.15h se producía un cambio de batería sobre el escenario que precedía la actuación de FRIEDA'S STILL IN LOVE Con una duración aproximada de 25 minutos estimados aprovechamos unos cuantos del Backstage para ir a cenar (recuerda que en mi caso llevaba desde las 17.30h allí, pero la organización y algunos músicos se habían pasado todo el día).A las 22.55h ya estaba presentando a la banda de Post Rock muy conocida en el ámbito local -y nacional para quienes amamos este tipo de música instrumental-. Más de 10 años componiendo piezas emocionales avalan una carrera musical impecable.Los sigo desde hace muchos años, de hecho yo empecé con DISTRITO UVE en 2010 y ya escribía sobre ellos entonces porque me fascinaban. Saben que me encanta lo que hacen y su actuación quedó a la altura de las expectativas que yo sembraba con mi presentación: «el tratamiento compositivo de las piezas manufacturadas por FRIEDA´S STILL IN LOVE se antojan perfectas, ceremoniosas y repletas de matices que los eleva a un nivel superior dentro del panorama nacional del Post Rock...».
«Tienen una capacidad especial para poner música a los sentimientos» formaba parte también de la descripción que quise ofrecer al público, y eso hicieron: pusieron banda sonora a lo que estaba sintiendo yo misma aquella noche.
Son capaces de trabajar la intensidad y jugar con ella magistralmente, sembrando expectación in crescendo hasta lograr una poderosa explosión instrumental que confluye en una conexión casi extrasensorial no solo con el público que los escuchábamos: también entre ellos. 
Tuve el privilegio de subir al escenario por el lateral, grabarlos, presenciar lo que os cuento, grabarlo y sentirlo con el añadido de notar las vibraciones ocasionadas por el sonido en el propio suelo del escenario: una experiencia que efectivamente me trasladó al particular mundo onírico que proyectan a través de sus composiciones. A continuación os dejo con uno de los vídeos cortos que grabé a pie de pista:
Puzzle Bobble
Karate Blazers
Puzzle De Bloques
Magical Cat Adventure