Esto no me puede estar pasando. ¿Tan horrible he sido como ser humano? Primero me muero. Luego me juzgan. Y ahora el mismísimo Dios me asigna un trabajo que detesto a cambio de mi plaza en el Cielo. ¡Por favor! ¿Que yo sea Cupido? ¿Que empareje a completos desconocidos y les lance flechas como si fuera un indio del oeste? Sin duda, por aquí arriba han perdido la cabeza y se han empeñado en que yo me una a su club de dementes…
Todos hemos pensado qué será de nosotros una vez hayamos muerto, aunque muy pocos han imaginado convertirse en Cupido y pillarse un pedo con San Pedro.
LA AUTORA:
Esta diplomada en Turismo nació en Valencia en 1988. Tras varias ideas guardadas en un cajón, se lanzó a plasmar sobre el papel una historia que bailaba en su cabeza. Desde entonces, ya no ha podido dejarlo. Adicta a las novelas románticas, siente especial debilidad por las protagonistas reales, divertidas e imperfectas.