Hace unos días, el 28 de mayo, se conmemoró con merecidas referencias el violento Combate del Uvero. Un deber elemental me obliga a esclarecer los hechos.
Por aquellas semanas Manuel Piñeiro, “Barbarroja”, genio y figura hasta la sepultura como dice la frase, hizo llegar a Santiago de Cuba un camión con armas asociadas al ataque a Palacio por el Directorio Revolucionario, que de alguna forma