Fidelización con marketing de experiencias

Publicado el 23 junio 2010 por Aracelimasarte @AraceliMasArte

Cambiar el concepto de retener por el de fidelizar revierte en un abaratamiento de costes, tanto en procesos de captación, como de rendimiento, de distribución y de seguimiento.

Retener implica accionar con excesiva tensión en todos y cada uno de los estadios que transita una relación sea esta de empresa - cliente o de empresa - empleado. Requiere desarrollar conceptos de elaborado análisis, argumentos más o menos sólidos que detengan una inminente partida con el 90% de oportunidades perdidas. Retener significa ponerse a idear, para dar marcha a estrategias que definen, de forma constante, siempre puntos de inicio, nuevos comienzos que se repiten en una secuencia infinita de movimientos que copian los mismos pasos, sin previsión de desarrollos donde, el mismo final de siempre, te coge por sorpresa.

Cuando decides que has de retener es justo, el momento, donde ves que las cosas han ido mal. Vuelves al mismo punto y descubres, que no le prestaste atención al proceso y no te diste cuenta de los errores. No asumir ésta constante marca de repetición significa obligarse a manejar un estado permanente, donde la incertidumbre, da paso a la necesidad de ocultación y a la elaboración sistemática de discursos que repites, consiguiendo, después, de todo el esfuerzo, el mismo resultado: Hay que olvidar a este cliente o empleado y lanzarse a la búsqueda de uno nuevo.

Si quieres resultados distintos resulta imprescindible hacer cosas distintas.


Si se elije, fidelizar el recorrido se manifiesta de forma sorprendente en nuevas posibilidades. Fidelizar consiste en conseguir una relación estable y duradera, cambiar la percepción de orientación al producto por una orientación al cliente - empleado. Atender a las necesidades del cliente - empleado obliga y enriquece. Desemboca en un aumento de la productividad por implicación convencida, un abaratamiento de costes por medición correcta de impacto, una generación automática en actitud positiva, una calidad superior en la profesionalidad. Una relación adecuada con el interlocutor le convierte en usuario o fans y éste, esperara, con ansia, el nuevo producto, te enriquecerá ofreciendo información con la que elaborar estrategias de compras adecuadas, Reorientará satisfactoriamente tus stocks dando pautas de reciclaje. Y dará rentabilidad a todas las inversiones.


El Marketing de experiencias aporta cimientos a toda una relación. El compartir experiencia ofrece la oportunidad de elaborar estrategias más efectivas para construir y profundizar una relación a la cual estás abocado. La experiencia es el momento adecuado para efectuar feedbak.
Sin este concepto, un producto seguirá siendo un producto. El esfuerzo que hay que realizar para ofrecer productos y servicios en un mercado abarrotado es de proporciones infinitas, cuando además, ya no solo transitamos por los puestos de un mercado de barrio, sino qu paseamos por una calle comercial, decidimos hacer de la ciudad nuestro lugar de trabajo, elegimos luego ocupar el país entero y luego, nos damos cuenta de que el espacio a conquistar es el global.