La propia FIFA tardó poco en corregir a su secretario general. Por medio de un comunicado oficial explicó que “las fechas exactas del torneo aún no se han decidido y siguen en un proceso de consulta que incluye a todos los protagonistas: FIFA, federaciones, ligas, clubes, jugadores y patrocinadores. Como el Mundial no se celebrará hasta dentro de ocho años, pasará el tiempo necesario para tomar una decisión. No se tomará una decisión antes del Mundial de Brasil”.
En los últimos meses, los dos primeros espadas de la FIFA y de la UEFA han ido trabajando el terreno para un cambio de fechas. Blatter dijo en este periódico que “se eligió a Qatar con un informe en contra de disputar allí un Mundial en verano”, y Platini, también en estas páginas, añadió que “en Qatar no es que no se pueda jugar al fútbol en verano, es que no se puede dar un paseo”. Es cuestión de tiempo que le den la razón a Valcke.