Filetes de pollo al sobre

¿Que tu marido tiene cuentas en Suiza y las tiene bloqueás porque lo han trincao y está en el trullo? ¿Que le has pedido a tu filipina que te prepare un cóctel de gambas y te ha hecho un corte de mangas que casi se te caen las bragas? ¿Que te han devuelto los recibos de la luz, gas y agua porque debes hasta de callarte? Si tú eres de esas, ÉSTA ES TU RECETA!!!. Sí, sí, como lo oyes. ¿Que qué necesitas?, pues mu fácil, la peluca morena que heredaste de tu tía abuela para disimular los dos dedos de raíces que te han crecido éste verano, unas gafas de sol para que tus ilustres vecinas no te conozcan cuando entres al Mercadona y el billete de 5 euros que encontraste en el pantalón de tergal de tu marido cuando le hacías la maleta destino Carabanchel. Mira por donde te va a venir de perlas.
Me enfrento a ésta nueva temporada con nuevas recetas, nuevos retos personales y nuevo look en el que he estado trabajando todo el verano intentando simplificarlo al máximo y hacerlo sencillo y asequible a todos cuantos pasais por aquí. Una pausa necesaria que me hace volver con aires renovados pero no con todo el tiempo que me gustaría dedicarle, aunque eso sí, con las mismas ganas e ilusión del primer día.
Y para ir calentando motores e ir animando a aquellos a los que todavía nos cuesta despegar, a los que la cocina les produce alergia o a aquellos que quieren quedar bien sin tener ni puta idea de cocina, nada mejor que una receta sencillísima y para la que sólo necesitamos tres ingredientes. Así que vamos que nos vamos.
INGREDIENTES:

1 bandeja de filetes de pechuga de pollo.
1 sobre de sopa de cebolla.
1 bote de leche evaporada.

PREPARACIÓN:

Disponemos los filetes de pechuga de pollo bien limpios en una bandeja refractaria para horno.
En un bol, mezclamos la sopa de cebolla con la leche ideal.
Vertemos la mezcla sobre los filetes de pollo e introducimos al horno precalentado unos 200º durante 20 minutos.

NOTA: Como acompañamiento le fries unas patatitas que están de oferta, 5 kilos, 2 euros, Y VOILÁ, ya tenemos un segundo plato en un periquete y para chuparse los dedos u otras partes del cuerpo, eso a discreción.

Fuente: Falsarius Chef
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