Filetes rusos

Por Maperi

El filete ruso o salisbury steak, también denominado hamburguer steak es una preparación a base de carne picada de vacuno o de cerdo, o mezcla de ambas, que se le da forma esférica y luego se aplasta para que parezca un filete. Se suele freir o asar en la parrilla y se sirve acompañado de salsas.
Tiene muchos orígenes posibles, pero parece ser que aparece por primera vez descrito en el Larousse gastronomique de 1936. Los inmigrantes alemanes de comienzos del sigo XX que viajaban a través de la HAPAG (empresa establecida en la ciudad alemana de Hamburg en 1814, cuyo objetivo era el transporte de bienes y personas a lo largo del Océano Atlántico haciendo que la gran mayoría de inmigrantes alemanes que pisaban suelo americano lo hicieran a través de esta compañía  transportaban las costumbres culinarias del continente, razón por la que en los puertos de destino se hiciera tan famoso el filete de Hamburgo (hamburger steak en ingles) que poco a poco se convirtió en la hamburguesa y que posteriormente se denomino salisbury steak en honor al químico y medico norteamericano James Henry Salisbury, término empleado en Estados Unidos desde 1897.
Que he utilizado:
200 gr. de carne de ternera
100 gr. de carne de cerdo
1 yema de huevo
1/2 cebolla
sal
pimienta negra
perejil
harina
aceite de oliva
Para acompañar:
patatas chips
salsa de tomate, ketchup,...
Como lo he hecho: 
He pelado y picado en juliana la cebolla. La he puesto a pochar en una sartén a fuego medio con una cucharada de aceite y una pizca de sal. Cuando ha estado pochada y ha comenzado a dorarse la he retirado del fuego y la he dejado enfriar.
Mientras he troceado la carne y la he picado con la picadora eléctrica junto con unas hojas de perejil. He puesto la carne picado en un bol y le he añadido la sal, la pimienta, la yema de huevo y la cebolla, he mezclado hasta integrar todos los ingredientes y he cubierto con papel film para dejar reposar la masa en la nevera durante una media hora.
Tras el reposo he repartido la masa en porciones iguales y les he dado forma redondeada, para luego aplastarlas. Las he pasado por harina rebozándolas ligeramente por ambos lados y retirando el exceso y las he ido friendo por ambos lados en tandas en una plancha engrasada con una pizca de aceite.
Las he servido bien calientes con unas patatas chips caseras y una salsa de tomate.
Y este es el resultado: 

Bueninisimos, para chuparse los dedos.