Cierre de año con el tercer nombre propio de 2010 de GENERACIÓN PERDIDA 2.0
En un año en el que aparte de los chilenos obstinados, el amplificador de los cuchicheos gubernamentales, el goleador de eGoli y un par de rebeldes asiáticos, el resto de los mortales no mereceríamos ni una sola línea en los libros de historia, el iPad, la cuarta temporada de Mad men, la música de Beach House y These New Puritans -adiós al secreto bien guardado-, la firmas cinematográficas de Rodrigo Cortés y Christopher Nolan y el espíritu viajero de algunos cuadros (mención especial a Muchacha con planta, de Dieberkon) han sido los únicos en poner de acuerdo a los inquietos. Ellos y Wilson, la narración gráfica de "un vago con un gran corazón, un solitario, marido y padre devoto, un idiota, un sociópata, un fantasma y un engreído, una flor delicada, o no...". Daniel Clowes homenajea a sus maestros en setenta páginas y nos entrega un personaje más grande que el más destacado de 2010. Que la vida de Wilson no trascienda del papel tintado sería pedir lo imposible. ¡Larga vida a Wilson!