Y para reforzar mi posición indico que solo los edificios del molino están sumergidos, así como el camino hacia Tamajón (camino del Degollado) y la vega del Jarama donde estaban ubicados los huertos. Ha tenido que ser Don Juan Luis Pérez Arribas con su libro ”Pueblos perdidos” quien nos saque (a todos) del error.
El croquis del pueblo (de 1.894) muestra que las aguas cubren la parte baja del pueblo (incluido la iglesia, el cementerio y el camino), dejando al descubierto la mayor parte del casco urbano (hasta el arroyo “vertiente de la iglesia” que actúa como lindero). Las fotos de Tomás Camarillo refuerzan esta afirmación.
Lar-ami