El viernes pasado, concluyeron las clases en primaria. Muchos alumnos quedaron libres, de las ataduras que representa asistir al colegio. Ahora son libres para disfrutar del verano, de los famosos "cuadernillos rubio", de las temidas "vacaciones santillana", o de los divertidos campamentos de verano, y sobretodo de la piscina del vecino. Vienen tiempos de siesta, partidos de fútbol, alguna que otra videoconsola, quemarse los hombros, muchos helados, y por encima de todo, disfrutar, reír y pasar el calor del verano con los amigos. Al ver esta divertida portada publicada en el semanario DDT número 338 publicado el 8 de septiembre de 1957, por Gin, me ha venido a la cabeza, toda la alegría, de esos alumnos, al salir el ultimo día de clase. Su alboroto era tal, y el autor lo ha reflejado tan bien, al compararlo con una marabunda, que arrolla todo a su paso inexorablemente. Tanto que una pobre chica que esperaba pacientemente a su hermanito, ha volado por los aires y ha su vez ha provocado el sorprendente comentario de la hormiguita. Una portada deliciosa, que muestra movimiento y versatilidad. Espero que os guste y la disfrutéis, tanto como yo.
El viernes pasado, concluyeron las clases en primaria. Muchos alumnos quedaron libres, de las ataduras que representa asistir al colegio. Ahora son libres para disfrutar del verano, de los famosos "cuadernillos rubio", de las temidas "vacaciones santillana", o de los divertidos campamentos de verano, y sobretodo de la piscina del vecino. Vienen tiempos de siesta, partidos de fútbol, alguna que otra videoconsola, quemarse los hombros, muchos helados, y por encima de todo, disfrutar, reír y pasar el calor del verano con los amigos. Al ver esta divertida portada publicada en el semanario DDT número 338 publicado el 8 de septiembre de 1957, por Gin, me ha venido a la cabeza, toda la alegría, de esos alumnos, al salir el ultimo día de clase. Su alboroto era tal, y el autor lo ha reflejado tan bien, al compararlo con una marabunda, que arrolla todo a su paso inexorablemente. Tanto que una pobre chica que esperaba pacientemente a su hermanito, ha volado por los aires y ha su vez ha provocado el sorprendente comentario de la hormiguita. Una portada deliciosa, que muestra movimiento y versatilidad. Espero que os guste y la disfrutéis, tanto como yo.