La poesía de Gloria Fuertes
Vendría la paz
Si todos los políticos
se hicieran poetas,
vendría la paz.
Si todos los políticos
se hicieran pacifistas,
vendría la paz.
Si todos los injustos
se hicieran el harakiri,
vendría la paz.
Niños de guerra
Niños de guerra que nunca fuisteis niños.
Sedlo ahora.
Jóvenes de guerra que nunca fuisteis jóvenes.
Sedlo ahora.
Hombres de guerra (que hicisteis la guerra)
y que nuca fuisteis hombres.
Ojalá os atosigue el pasado.
Preces (oración)
¡Qué guapos pueden ser los feos!
¡Qué feos pueden ser los guapos!
¡Qué malos podemos ser los buenos!
¡Y que nunca,
pueden ser buenos los malos!
(los malos no tienen la culpa)
es cuestión de biocardio,
sus células no funcionan
para querer ser adversarios.
Por ellos,
recemos el antirrosario.
Vamos a ver que nos dice el refranero sobre la adulación.
A quien has menester, llámale de merced, y si de él has menester otro día, llámale de señoría.
Cuando un empleo pretendas, en lugar de usía, da excelencia.
Jarabe de pico, a muchos hizo ricos.
No hay terciopelo que no se arrastre por el suelo.
Lamiendo culos subió Miguel, y ahora le lamen el culo a él.
Y durante el fin de semana vamos a ver si somos capaces de escuchar al Mochuelo.