Para muchos el episodio que finiquitaba una de las series emblemáticas de los últimos años ha supuesto una decepción en cuanto a algunos interrogantes que esperaban la oportuna respuesta. A mí siempre me ha pasado algo raro con los finales de las series, y es que suele haber un cara o cruz. O gusta o no gusta. O te decepciona o te satisface. Normalmente no suele haber medias tintas en ese aspecto. Y es que cuando has seguido una serie durante muchas temporadas, lo normal es que acabes esperando, imaginando sobre todo, un final que no llegas a ver. Por eso a veces se puede llegar a una sensación agridulce que te entra por el cuerpo y que sólo el tiempo puede llegar a apaciguar en mayor o menor medida. Es lo que hay, aunque hubieses querido otro final tienes que aceptar el que te han dado, aunque sea a regañadientes (podría poner de ejemplo el de “X-Files”, otro que no agradó a sus seguidores por lo precipitado).
Con “Perdidos” pasa tres cuartos de lo mismo. ¿De verdad esperábamos que todas LAS RESPUESTAS fueran dadas? ¿De verdad se esperaba QUE SE DESVELASE EL SECRETO DE LA ISLA? ¿Y el resto de cosas (la estatua gigantesca por ejemplo) que dieron mucho de qué hablar? Pues lo han dejado o a la imaginación, a próximas películas para cine (cosa que dudo) o libros analíticos que tendremos que comprar y analizar de “p” a “pa” para entender completamente lo que nos han ofrecido en seis temporadas.
Entremos en materia, ya que si sois seguidores de la serie seguro que tendreis muchas cosas que comentar.
Nada más ver el final (el cual me han grabado ya que no he sido tan fan como para verlo en CUATRO o en la FOX) he hecho un par de cosas. Una de ellas mirar por la web y notar si el episodio había gustado o no (el debate con Siñeriz, Flipy y compañía me lo he saltado completamente) y la otra revisar el primer episodio de la temporada. Ahí hay detalles que podemos ver de nuevo en el episodio final (más concretamente en las últimas escenas). De nuevo Jack vuelve a ser el protagonista que fue en un principio (si es que alguna vez dejó de serlo a favor de otros personajes), volvemos a ver esa zapatilla colgada en una rama (lo cual indica que el círculo, en cierta manera, se ha cerrado. Principio y fin se dan la mano con ese guiño). Y de nuevo el médico vuelve a estar sólo, igual que cuando comenzó la aventura que nos ocupa.
No sé hasta que punto se podía esperar un final perfecto, con cabos atados y bien atados. En cierta manera hablamos de una serie donde las incógnitas, los misterios, el enredo máximo, era el punto de referencia de la serie. Quizás por ineptitud o quizás porque lo han preferido así (aquí entraríamos en elocubraciones varias) los guionistas, las respuestas no se han dado totalmente. Se ha preferido dejar en el aire y en la imaginación, en las teorías de los fans (algunas enrevesadas y otras con una lógica aplastante), el desenlace de los asuntos más vitales de “Perdidos”. En cierta forma casi lo he preferido. He preferido imaginarme quien podía ser la mujer que adoptó a Jacob y su hermano. Imaginarme lo que era la “LUZ”. Imaginarme el resto de cosas que en un segundo visionado de la serie (el cual voy a hacer recientemente) pueden volver a surgir. Y de nuevo digo, es lo que hay. Para bien o para mal, para disgusto de quienes querían un final completo, nos han dado esto.
En Tu Blog de Cine he leído un comentario acertadísimo sobre el tema. Perfecto diría yo. El final de “Perdidos” ha sido un final de personajes, no de la trama y de los misterios. Ahí radica el tema en cuestión. Haber esperado un final autoconclusivo donde se nos hubiese explicado el origen y el por qué de todo. A mí me ha gustado la reunión de todos los personajes, los recuerdos que les asaltaban (con flashbacks de sus vidas en la isla) cuando se iban conociendo. No voy a negar la piel de gallina que se me ha puesto en algunos momentos (cuando Kate recuerda el parto Claire, la relación de Sawyer y Juliet o Charlie recordando a Claire, entre otros). Ahí lo han bordado.
Quizás se plantee, segun he visto, algunas incognitas en cuanto a la explicación final. Una que ya se barajó en su momento en los foros de internet. Tal y como lo veo yo, o tal y como nos han explicado, Jack y el resto de sus compañeros estan muertos. Pero no muertos en la isla. Es decir, lo que se ha visto en todas las temporadas sí ha ocurrido. No es una paja mental que el personaje se ha inventado (tal y como se pudo ver en una película de Adrian Lyne protagonizada por Tim Robbins -no doy más pistas que conste-). Simplemente su muerte y la de sus amigos (los que murieron en la isla y los que morirían más tarde -nunca se sabe cuando la muerte te va a reclamar-) se han reunido en una especie de limbo (no un purgatorio, tal y como decía otra de las teorías sobre el final de la serie). Y es que la experiencia que vivieron hizo que todos los caminos llevasen a Roma, como quien dice. De ahí que el recuerdo de su gran experiencia acabase siendo el detonante para el paso final que tenían que dar. Todo muy religioso y tal, aunque se puede ver de la forma que a uno le apetezca. Y es que el final ha sido de los felices, donde los protagonistas acaban todos en pareja, contentos y abranzandose los unos a los otros. Incluso Jack acaba (ahí tenía mis dudas) con Kate. Después de tantos sufrimientos, recordemos que se ha pegado toda la serie sufriendo -tanto en la Isla como fuera de ella-, parece que acaba encontrando la felicidad.
Creo que la decepción inicial de este episodio, tal y como he dicho por la falta de respuestas a los grandes interrogantes, puede llegar a obviarse si nos atenemos al principio fundamental de la serie (porque si no es así más de uno lo va a pasar fatal). El misterio. Ése que produce que los comentarios y opiniones de la gente, de los admiradores, de los fans, de los frikis, pueda alimentar aun más el poder de dicha serie. Que luego nos vendan la moto con libros sobre el tema ya será otra cosa, pero de momento la veda de teorías se vuelve a abrir, y eso nunca lo he visto negativo, si no más bien al contrario.
Fdo: Snake