FKA Twigs – Cellophane

Publicado el 27 abril 2019 por Carlosgu82

FKA Twigs ha sido una artista extraña para muchos, para otros un objeto de injustificado odio y racismo, yo la conocí bajo el manto de tratar de colgarse de la fama de su ex novio. Bajo las circunstancias menos favorables incluso suceden cosas buenas, porque ni siquiera aquellas difamaciones pueden ocultar cuán talentosa es, su dedicación a su propio arte.

Su más reciente single despierta una vulnerabilidad conmovedora y visuales aún más cautivantes. Siempre que veo un tubo de pool dance tengo mis propias reservaciones, pero en un instante ha borrado cualquiera de mis prejuicios y me ha demostrado que puede ser más que un instrumento erotico. Por supuesto que FKA Twigs exuda sensualidad, pero no es algo anormal, siempre ha sido una mujer atrayente con su movimiento corporal, pero en este video siento algo incluso nostálgico.

Las tres partes más importantes de su video son su ascenso, su caída, y su renacimiento. Llega y se presenta ante la audiencia; cualquier sentido de resguardo y seguridad es dejado atrás con su abrigo, les da un espectáculo inigualable, la luz sobre ella comienza a convertirse en el cielo, en su mirada hay curiosidad inocente ante el panorama que se abre ante ella, asciende hasta lo que cree es finalmente su cumbre y una forma alada baja del cielo para mirarla a los ojos, toca a esta criatura humanoide y por un momento es como si lo hubiera logrado, ha conectado con la forma más celestial.

Pero es engullida y dejada al vacío cayendo en una espiral sin control. No es dueña de sus movimientos, la luz parpadea mientras el toque celestial que ha experimentado la abandona hasta dejarla en la oscuridad. Ha ascendido y ha caído. Vistazos de su antigua gloria transcurren entre parpadeos mientrastrata de aferrarse a una mano que se extiende, tal vez de un antiguo amor o de los espectador, pero quien sea que fuera, no es suficiente, la deja en caída libre hasta estrellarse en la tierra.

Herida colapsa, a su alrededor aparecen figuras enmascaras que se arrastran como demonios. Estos levantan su cuellos y dejan ver sus rostros, son reales, están ahí y se acercan para comenzar a cubrirla en barro, se siente casi como un ritual sanador. Sus ojos se abren de par en par, renace de sus propias raíces, con una fuerza que no había demostrado hasta aquel momento, respirando agitadamente como un recién nacido.

Tras cuatro años de ausencia FKA Twigs regresa para recordarme que una caída en picada no tiene que ser el final.