Vuelvo a copiar los párrafos iniciales de la entrada dedicada a la flora.
Antes de todo, quiero aclarar que esta publicación no es representativa de la flora y la fauna conquense.
El escrito de hoy he querido enfocarlo a aquellos elementos que se han cruzado en mi camino por Cuenca. Algunos son representativos de la zona, aunque otros lo son únicamente para mí.
He intentado reflejar la simbología de cada planta y de cada animal dentro de lo que es la cultura occidental y sus diferentes religiones y, por otra parte, la significación que tiene para mí.
Por ello, entre la cebada, los girasoles y los gorrinos conquenses, no os extrañe que haga alusión a las amapolas o a las hormigas, pues como ya os he adelantado, mi experiencia está entremezclada entre estos clásicos de la provincia de Cuenca.
También quiero aclarar que para saber las significaciones de todo lo que he elegido, me he basado principalmente en el libro de Lucia Impelluso La nature et ses symboles.
Sin más dilación, sigamos con la fauna que vi en Cuenca. Es una pena que aquí casi no tenga fotos, pero bueno, si os quedáis con ganas de animalitos podéis tirar de documentales de la 2. Si encontráis algún error o algo que matizar o puntualizar, tenéis al final los comentarios. No soy botánica ni bióloga, así que probablemente patine en algún que otro apartado.
No podía comenzar por otro animal que no fuera el llamado mejor amigo del hombre.
El perro posee significaciones opuestas, aunque bien es cierto que predomina la de la fidelidad. También supone el sacrificio, la fuerza de voluntad, el mal, el olfato y es atributo de las alegorías del Desacuerdo, la Fidelidad, la Búsqueda, la Memoria y el Espía.
Plinio el Viejo ya apuntaba en sus días que era, junto al caballo, el más fiel compañero del hombre.
Dentro de la mitología, el perro se atribuye a la diosa de la caza Diana y a otros cazadores como Adonis, Céfalo o Acteón, este último transformado en ciervo y devorado por sus propios canes.
Mi perrita Kira es la que ha logrado que yo haya encontrado un poco de paz y de serenidad en Cuenca. Porque los animales tienen super poderes. Así que sólo me queda esperar a que se levante la cuarentena para ir a la búsqueda de muchas más aventuras y excursiones con ella.
La Kira entre el sembrao con la mononeurona en plena efervescenciaEn numerosas civilizaciones de nuestra historia se la ve con gran desconfianza. Normalmente la ardilla toma significaciones negativas como el mal, el diablo y la providencia divina, además de considerarse un animal que busca el conflicto, la disputa y que destaca por su rebeldía.
Yo la verdad que ya voy viendo unas cuantas en Cuenca y son una monada. En Cuenca ciudad ya las he visto tanto a las afueras del Casco Antiguo como en la zona de la Universidad y, en las excursiones que me hago por ahí, la Kira ya fue corriendo detrás de alguna.
Es un animal que me transporta a mi infancia, a cuando se veían ardillas pelirrojas y de colas súper pimpolludas en el Parque San Francisco de Oviedo.
Tanto el conejo como la liebre se encuentran asociados a la fertilidad, la lujuria, el placer y se atribuyen a Venus.
Por otro lado, puede parecer contradictorio que también tengan valores positivos en la iconografía cristiana, pero así es. Muchas veces podemos encontrar conejos blancos a los pies de la Virgen María en representación de la castidad o de la victoria sobre las pasiones y el placer.
Me he cruzado con bastantes conejos por las carreteras de Cuenca, sobre todo al atardecer, como en Villaconejos de Trabaque y en la carretera del Cerro del Socorro de Cuenca capital. La verdad que tienen unas orejinas muy cuquis y una redondez muy adorable.
Ciervos, venados, gamos, corzos… Todos los cérvidos me valen porque no los distingo.
Como ya comentamos en los perros, Acteón es transformado en ciervo por Diana. ¿Por qué se cabreó tanto la diosa para castigarlo así? Pues porque Acteón tuvo la osadía de espiar a Diana y a sus ninfas mientras se bañaban desnudas en el río. Ay amiguín… Pilláronte y castigáronte eh…
Además de Acteón convertido en ciervo, tanto el carro de Diana como el de Cronos son tirados por ciervos y, el tercer trabajo de Hércules consistió en capturar el animal mitológico de Cerinea, una cierva espectacular.
Respecto a su significación, representa el alma que aspira a encontrar a Dios, es imagen del bien y alude a la capacidad auditiva.
Me acuerdo mucho de cinco ciervos que me estuvieron siguiendo durante un par de horas en Las Majadas. Y también tengo unos cuantos cruzados en la carretera, sobre todo en la del Cerro del Socorro de Cuenca.
Las ovejas, las cabras, los corderinos… También van todos en el mismo saco, como los cérvidos.
Desde el principio de los tiempos son símbolo de inocencia, de hecho, el cordero es ofrecido en sacrificio por los hebreos en Pascua, así que la religión cristiana lo adopta como símbolo de Jesús y del sacrificio. Además, se atribuiye a la alegoría de la Inocencia, a la de la Mansedumbre, a la Paciencia y a la Humildad.
Este es el momento en que me acuerdo de la oveja amastinada Brunilda, que tenía a nuestros dos mastines, una pastora alemana y dos prirribirris acojonaos y derechos como velas. Y dicho sea de paso, a mí también.
O de la oveja Flor, que arreglarle las patas era como lidiar con un toro de miura que rebotaba en el suelo cual pelota de tenis.
O también me acuerdo de las tres ovejas que tenemos ahora, Doña Escotofia, Oscarina y Rubita. Las tres con la mirada más torcida y esquiva que yo qué sé.
Seres inocentes. ¡¡JA!! Yo las asocio a seres demoníacos y con una colgadura mental muy gorda.
Bueno, si en Asturias ya tenía contacto con ovejas, en Cuenca vivo rodeada de ellas y son mi banda sonora de todos los días.
El toro y, por ende, las vacas
Imagen de fuerza y potencia, el toro es venerado desde las más antiguas civilizaciones agrícolas, también debido a su vigor sexual que se asocia a la fertilidad y a la fecundidad.
En mitología, encontramos el minotauro de Creta asesinado por Teseo, también el séptimo trabajo de Hércules es capturar el toro que molestaba a Creta. Y, por otro lado, tenemos a Júpiter transformado en toro blanco para raptar a Europa.
Como os podéis imaginar, es traspasar la Cordillera Cantábrica y ver cómo aumenta exponencialmente la pasión por los toros y las vaquillas. Pero no toros libres, pastando tranquilamente, sino toros en las plazas o víctimas de espectáculos “festivos” de lo más mierda que hay.
Obviamente, hay que respetar todo, pero cuando llegué a Cuenca fue una de las cosas que no lograba centrar. Ver carteles por las calles anunciado toreros, corridas en las plazas o las vaquillas… De verdad… Todo miserias. También he de decir que me ha abierto más la mente. Porque para mí la gente taurina eran malos y ya. No veía más allá. Y bueno, que te sorprendes hablando tan panchamente con alguien que de repente saca ese lado y no es incompatible alguien majo con ser taurino. Una pena, pero es un perfil que existe y que yo no concebía en mis pocas miras. Con todo, es algo que me sigue desagradando hasta límites insospechados.
Las vacas que me encontré en Cuenca fueron de Las Majadas. Eran muchas vacas blancas y peludas, con unos cuernos como de unicornio, que quedaron hipnotizadas por la Kira y empezaron a perseguirnos mundo alante. Menos mal que los ríos hacen de fronteras naturales y, una vez pasado el río, dejaron de perseguirnos. Pero madre mía lo mal que lo pasé, y yo creo que la Kira también pasó apuro.
Cuando hablamos del perro, ya habíamos comentado que el caballo es uno de los animales más fieles al hombre.
Es un animal que encarna la fuerza, la vitalidad, la victoria, el orgullo y la lujuria. Dentro de la mitología, se asocia a la diosa Europa. Además, son numerosos caballos los que tiran de los carros de divinidades como Aurora, Helios, la Noche, la Luna, Plutón o Marte. Por otra parte, conocemos el caballo de Troya, a Pegaso, el famoso caballo alado o el octavo trabajo de Hércules, que consistía en capturar las famosas cuatro yeguas de Diomedes.
En Asturias tengo a la Bruja y en Cuenca tengo distinguidas conversaciones con Gitana y con Capricho. Dos caballos que vienen a verme cuando doy un paseo con la Kira y a los que, obviamente, yo no he puesto esos nombres.
Gorrino por estas tierras y gocho en mi Asturias patria querida, es considerado símbolo de fecundidad y de prosperidad desde las civilizaciones más antiguas. También se le atribuyen valores negativos debido a sus “malas costumbres”. Estos atributos son la lujuria, la avaricia, la glotonería, la holgazanería, la ociosidad o la gula.
Un capítulo muy famoso dentro de la mitología es el de la maga Circe transformando en cerdos a los compañeros de Ulises.
En Cuenca hay bastantes cerdos y gracias a Dios no he visto ni escuchado ninguno, porque si se da el caso me muero de pena y me echo a llorar fijo. Eso sí, su olor me persigue a todas partes y es super desagradable.
En el imaginario de múltiples civilizaciones, las arañas son vistas desde una perspectiva negativa, ya que se la tiene como un animal tramposo que es símbolo del diablo al atraer a los hombres hacia el pecado. Además de las trampas y del diablo, también se le atribuyen la industria y la dialéctica.
En cuanto a la parte mitológica, la joven Aracne es transformada en araña por Minerva como castigo por su soberbia.
Desde luego que en Cuenca no tengo una Señorita Pepis como la que defiende mi tía Arancha a capa y espada, pero también tengo unas arañas como puños que intento sacar de la mejor manera posible por las ventanas sobre las tres de la mañana, que es su hora. Fue en este momento cuando me di cuenta de por qué tengo mosquiteras y de por qué hay que usarlas.
Reina de los cielos, el águila porta en su vuelo la significación de poder y victoria. También se atribuye a la vista, al orgullo, a la regeneración del hombre y es atributo de las alegorías del Genio, la Inteligencia y de la Libertad, además de emblema heráldico de numerosos nobles.
Dentro de la mitología, encontramos este ave relacionada con Júpiter, el rey de los dioses. Júpiter se transforma en águila para raptar a Ganímedes. Por otra parte, Hebe, la ayudante de los dioses y esposa de Hércules, algunas veces es acompañada por un águila. Finalmente, todos conocemos el mito de Prometeo encadenado, en el que cada día un águila desciende a comerle el hígado.
Se ven bastantes tipos de aves rapaces en Cuenca y reconozco que no sé distinguir ninguna.
El otro día la Kira estaba muy activa/inquieta durante el paseo y acabó espantando de entre los pinos a la más grande que vi en mi vida. Menudo pedazo de bicho y menudo vuelo más espectacular.
Casi todos los días veo otro águila sobrevolar las gallinas de enfrente. Y ellas, que son muy listas, salen disparadas a refugiarse. Así que cuando veo las gallinas correr, sé que están en el punto de mira de alguien más alto y más grande que ellas.
Y otra vez que lo flipé muchísimo fue en la zona de Jábaga. En julio me dio por dar una de mis vueltas con el coche y escuché un chillido como los de los documentales que me puso los pelos de punta. Y super cerca de la luna delantera apareció volando a ras de mi coche un pedazo bicho con unas garras acojonantes que me dejó flipada.
Desde la Antigüedad se le atribuye ser un chismoso, un charlatán y un indiscreto Además, también se le relaciona con la mala suerte, el diablo y la muerte.
Inicialmente es el fiel compañero de Minerva, quien lo prefiere antes que a la lechuza. Pero como todo hombre, tiene que venir Apolo a tocar los cojones y a meterse donde nadie lo llama y se lo cambia por un pájaro negro cualquiera.
Cuando los veo en Cuenca picoteando entre las parcelas me viene a la cabeza el recuerdo de sus graznidos revoloteando por los bosques de Campo de Caso. Y ya para rematar entornos dispares, también los recuerdo por las calles de París, sobre todo en el Jardin des Tuileries.
Lo que he encontrado sobre el gallo tiene que valer para ellas. Se las asocia a energías del otro mundo y, al anunciar un nuevo día con su canto, también se relacionan con el sol y las divinidades solares como Apolo, Esculapio, Marte y Mercurio.
Su significado está ligado a la Pasión de Cristo, la vigilancia, la lujuria y a las alegorías de la Medicina, el Estudio y la Atención.
Sinceramente, me cuesta ligar las gallinas y los gallos a tales atributos con esos ojos locos que tienen. Que cuando las coges y las giras, el cuello no se les mueve del sitio. ¿Qué puede aportar eso a su evolución como especie?
Dejando a un lado lo que a mí me parece o deja de parecer, es como si fueran mi televisión. Tooodos los días las veo picoteando de un lado para otro, cómo se tumban a la sombra o cómo se lavan en los dos hoyos de tierra que tienen. Que las cabronas me pegan unos sustos de su madre, porque quedan ahí metidas en el hoyo medio escogorciás y parece que les ha dao el parraque, ahí con el ala medio tiesa y estáticas totalmente.
Luego hay otra gallina con las ovejas y la cabras de las que os hablé más arriba que es la monda. Es de color blanco nucelar y es ella la dueña y señora de toda la nave. Va el pastor a abrirles y ella es la primera que sale capitaneando todo, ovejas, cabras, el mastín y lo que se tercie. Y para volver a la nave lo mismo, es como si los pastoreara a todos ese punto blanco resplandeciente. Además de que menudos andares que tiene la tía. Es como un velocirraptor.
Desde la antigua Roma la golondrina es considerada signo de buen augurio y se cree que los espíritus de los niños fallecidos se convierten en golondrinas con el objetivo de volver a sus casas. Dentro de la religión cristiana, se asocian a la reencarnación de Jesucristo y a su resurrección. En el campo mitológico, encontramos a Filomena transformada en golondrina.
Pues pasé mis dos primeros meses en Cuenca creyendo que lo que veía volar por todas partes de la ciudad eran golondrinas muy gordotas Y NO. Eran VENCEJOS. ¡PUM!
El ave de mi mamá. Son el símbolo de la paz, reconocido así de forma universal. Se asocia a las cualidades positivas de la dulzura, la prudencia, la inocencia, la paz, el Espíritu Santo, la Virgen María y el placer y la lujuria.
En mitología, el carro de Venus es tirado por palomas.
Me acuerdo mucho de mi madre cuando veo todos los días volar dos bandadas de ellas delante de mi ventana. Estoy segura de que a ella también le encantaría verlas.
Poco he encontrado sobre ellas más que que eran los animales consagrados a Minerva junto a la lechuza, el dragón y el escarabajo.
El pueblo griego de los mirmidones, quienes participaron en la Guerra de Troya bajo las órdenes directas de Aquiles, se autonombraban “hormigas” debido a la tierra árida de la que procedían (Tesalia). También, porque al igual que las hormigas, tenían que retirar los sedimentos y los pedruscos (en Cuenca majanos) a la hora de labrar sus tierras.
Respecto a la parte mítica, el rey de este pueblo era Mirmidón, quien descendía de Zeus y de la princesa Eurimedusa. Zeus, para ligarse a la princesa, se transformó en hormiga. (Y ahora es el momento en que todos nos preguntamos qué coño ha pasado aquí para llegar a este punto. ¿Una hormiga cortejando? ¿En serio?)
Otra versión es que la ciudad de los mirmidones quedó despoblada y, para repoblarla, Zeus convirtió las hormigas de un roble en humanos.
Bueno, en mis paseos con la Kira, no sé si es debido al confinamiento por el coronavirus y a que no hay casi nadie transitando los caminos de tierra, pero ver la evolución de un día para otro de los hormigueros me tiene alucinada. Es que construyen verdaderas obras de ingeniería siendo tan sumamente pequeñas… Así que supongo que la significación que les atribuimos hoy en día es la de trabajadoras.
El buitre se asocia a Titio, a quien dos buitres le comen el hígado, parecido a Prometeo, porque con este último, unos dicen que es el águila quien desciende todos los días a comerle el hígado y otros lo achacan al buitre.
No he encontrado más cosas sobre los buitres. Aquí en Cuenca se ven un montón y muchos parajes de los pueblos por los que trabajamos se llaman La Buitrera/La Butrera/Cercado de la Butrera/Cerro de la Buitrera, etc.
Los cercados de los buitres sirven para llevarles animales muertos como carroña y nunca hubiera imaginado que quien entra en esos sitios, cuando sale se tiene que desinfectar hasta el alma… Brrrr.
La verdad que es impresionante verlos en sus nidos y volando… Increíbles.
Se representa bajo el aspecto de un caballo, normalmente blanco, que lleva en medio de su frente un cuerno largo, en espiral y puntiagudo. También puede representarse con barba de chivo, cola de león y patas de bovino.
Significa pureza, castidad, virginidad y el carro de la alegoría de la Castidad es tirado por estos seres. Que sepáis que su nombre científico es Elasmotherium sibiricum.
Para el equipo de Rubén, Nieves y Sonia, el unicornio está asociado a una nube super esponjosa con purpurina, brilli brilli, arcoíris y mucha felicidad. Y debajo de esa nube puedes ir cabalgando, sentado del revés, un super unicornio dorado, plateado y purpurinado con crines de arcoíris.
Espero que os hayan gustado los animalitos que encontré en Cuenca. Os recuerdo que también hay una publicación dedicada a la flora aquí.