Flores de sartén

Por Marisma

Esta entrada se la quiero dedicar a Sofiaaurora que me hizo llegar hace poco los regalos de su concurso del cual fui agraciada. Entre los regalos se encontraba el molde de las flores de sartén que tantas ganas tenía de tener.

Estas flores siempre me han recordado a mi vecina Agustina que nos las hacía algunas veces cuando éramos pequeños y nos encantaba su forma y su sabor. Quedan preciosas y no son nada difíciles.

Como es la primera vez que lo utilicé puse la mitad de los ingredientes de la receta que la copié de La cocina de Morenisa . Y salieron siete. Hay que decir que al final se desperdicia un poco de masa al quedar poco y no poderse mojar bien el molde, pero ya le buscaré utilidad para no desechar nada. Si queréis la receta completa solo hay que doblar las cantidades como haré yo la próxima vez.

Gracias Sofiaaurora, gracias Morenisa!

INGREDIENTES

-3 huevos

-la mitad de medio vaso de leche (58ml.)

-60g de harina corriente más otra cucharada sopera colmada

-azúcar para rebozar

PREPARACIÓN

En el vaso de la batidora batimos todo menos el azúcar que es solo para rebozarlas cuando estén fritas. Es una masa ni líquida ni demasiado densa. tiene que quedar que cuando mojes el molde no se escurra la masa demasiado y queden las paredes del molde totalmente cubierto.  Esta es la cantidad que salió de masa y ese que veis es el molde de las flores.

Ponemos en una sartén mediana y honda abundante aceite de girasol. Como tiene que ser honda, si no tenéis  lo ponéis en un cazo mediano como hice yo, con el fin de que se frían holgadas en el aceite. Ponemos  el molde de pie en el cazo con el aceite mientras se calienta.

La masa la pasamos a un recipiente más ancho pero no mucho, lo suficiente para que entre el molde para mojarlo. Cuando esté el aceite bien caliente cogemos el molde, lo escurrimos, y lo mojamos en la masa, pero sin mojarlo por completo con el fin de que se pueda soltar fácilmente en la sartén. Así:

Y ahora lo ponemos en la sartén sin apoyarlo del todo, meneándolo un poco con la mano hasta que se suelte, y se suelta fácilmente.

Dejamos dorar un minuto..

Y le damos la vuelta con la ayuda de dos tenedores. Dejamos dorar también por ese lado otro minuto.

Ahora la sacamos a un colador grande sobre un plato para que escurra el exceso de aceite que pueda tener y procedemos del mismo modo para hacer otra flor. Y así hasta finalizar con la masa.

Truco: Mojar en aceite el molde y sacudirlo cada vez que vayamos a introducirlo en la masa, así se suelta antes y mejor.

Mientras se fríe otra mojamos esta en azúcar, siempre antes de que se enfríe que si no no pega el azúcar.

El aceite de freír las flores lo guardaremos en un tarro grande cuando esté templado y lo podremos reutilizar para otras frituras que requieran aceite de girasol  porque queda limpio.

Y este es el resultado, una merienda exquisita, sencilla y lo que es más importante, barata.