Las escenas de largas filas y pasajeros frustrados en el aeropuerto de Santiago son cada vez más frecuentes, y ponen de relieve un problema creciente en los aeropuertos de todo el mundo: sistemas de procesamiento de pasajeros e infraestructura obsoletos que luchan por mantenerse al día con la mayor demanda de viajes. Pero una solución está al alcance de la mano: la tecnología biométrica.
Como tecnología, la biometría ha sido utilizada por el sector de los viajes desde hace algún tiempo. Su existencia fue impulsada en gran parte por los devastadores ataques terroristas del 11 de septiembre y la necesidad de aumentar la seguridad y la comodidad en las transacciones de identidad de alto riesgo, como el control fronterizo. A lo largo de los años, la colaboración entre aerolíneas, aeropuertos y proveedores de identidad ha definido un ecosistema de identidad digital biométrica que ha mejorado significativamente las experiencias de los pasajeros para muchos en todo el mundo.
Como bien se documenta en el informe The Acuity Biometric Identity Digital Identity Travel and Hospitality Prism después de décadas de desarrollo y refinamiento, la identidad digital biométrica para viajes está preparada para tener un impacto significativo. Ahora estamos listos para revolucionar la forma en que viajamos, ofreciendo mayor seguridad, comodidad y eficiencia.
Daniel Molina, Vicepresidente de iProov para América Latina, comenta que “imaginemos un mundo en el que se pueda evitar las largas colas del aeropuerto y moverse sin problemas desde el check-in hasta el embarque con solo echar un vistazo a una cámara. Esto ya no es una fantasía futurista; es una realidad en la estación internacional de tren de St Pancras en Londres, donde Eurostar, el operador ferroviario transeuropeo, ha implementado con éxito la tecnología biométrica”.
“Los pasajeros ahora pueden registrar de forma segura su billete, pasaporte y rostro cuando facturan utilizando sus dispositivos móviles. ¿El resultado? Una experiencia de viaje sin contacto, sin billete y segura que mejora significativamente el viaje del pasajero y permite ofrecer una mayor cantidad y calidad de servicio”, explica el ejecutivo de iProov.
¿Por qué la biometría en los aeropuertos?
Investigaciones recientes muestran que el 80% de los viajeros estadounidenses ya utilizan la biometría en los puntos de control de seguridad de los aeropuertos, lo que demuestra una fuerte aceptación de esta tecnología. Y no es de extrañar: estos exigen cada vez más una experiencia de viaje más fluida y eficiente. Otro estudio reveló que el 75% prefiere usar la biometría en lugar de los pasaportes y tarjetas de embarque tradicionales.
Daniel Molina agrega que “la biometría ofrece una solución convincente que aborda múltiples desafíos en el procesamiento de pasajeros. Mediante la implementación de sistemas biométricos automatizados, los tiempos de espera pueden reducirse significativamente, eliminando cuellos de botella y largas colas. La tecnología de verificación facial y detección de vida mejora la seguridad al verificar con precisión las identidades, combatir el fraude y mejorar la seguridad general”.
Más allá de la comodidad: abordar los problemas de seguridad
La tecnología biométrica también desempeña un papel crucial a la hora de abordar los desafíos de seguridad modernos. Combate eficazmente el fraude de identidad, garantizando que las personas sean quienes dicen ser. Esto es particularmente crítico en entornos aeroportuarios donde la seguridad es primordial.
Satisfacer las demandas de los viajeros modernos
Los viajeros de hoy en día anhelan experiencias personalizadas, fluidas y eficientes. La biometría permite a los pasajeros tener un mayor control sobre su viaje, al tiempo que satisface la necesidad de la industria de viajes de una seguridad sólida y operaciones optimizadas.