Yo no he visto color. He visto ocho mujeres con ocho historias capaces de encoger el corazón. He visto además a ocho extraordinarias actrices capaces de aguantar el primer plano como pocas. Dejadme entonces creer que el resto de mujeres también estamos implicadas.
No vi nunca la obra de teatro, pero tal vez hubiera sido interesante para comprender y asimilar mucho mejor la lírica de sus diálogos. No sé si trata de una gran adaptación, sólo sé que a mí los monólogos en primerísimo primer plano basados en figuras tan retóricas, más que erizarme la piel, me han sacado de la película. Me han hecho sentir ganas de ir a hacer pis mientras acababa y volver para saber qué más ocurría. Supongo que es una cuestión de lenguajes, aunque reitero, vaya monstruos de la interpretación.