Formas de comunicación social: la desinformación

Publicado el 09 abril 2014 por Lo Que Diga Mcluhan Silvia Tinoco @DunaLoves


Tirando de mis apuntes de la carrera, hoy nos vamos a sumergir en el maravilloso mundo de la desinformación. Tenemos acceso a tanta información actualmente que acabamos infoxicados, es decir, podemos adquirir un amplio conocimiento, pero también podemos llegar a información que no es correcta. En esta época de redes sociales, por donde circulan a una velocidad vertiginosa los flujos de información como si fuera una carrera en la que gana quien informa primero, es fácil caer en la desinformación.
Históricamente es un concepto que está peligrosamente cerca de la propaganda. Y es que algunas de las definiciones que más han trascendido han sido concebidas y contextualizadas en períodos de conflictos bélicos, por lo que "desinformación" se suele identificar con "manipulación". Esto es perfectamente comprensible cuando descubrimos de la desinformación nace en la Unión Soviética, cuando con la manipulación de la información se pretendía desacreditar al oponente y falsificar la realidad.
Dicho mal y pronto, la desinformación es silenciar interesadamente la verdad, un concepto bastante actual, ¿no os parece?
Definiciones:
Jaquard concibe la desinformación como información manipulada pero que conserva su verosimilitud, y cuyo fin es influir en la opinión pública.
Fraguas es más técnico y la define como "la acción del emisor que ensambla los signos para disminuir, suprimir o impedir la relación entre la representación del receptor y la realidad original".
Cathala habla de un conjunto de procedimientos y técnicas dialécticas que se utilizan con intención de manipular e influir en las conductas y pensamientos de los individuos. Esto implica disimilar las fuentes y los objetivos reales. Tiende a desestabilizar a una sociedad, desestructurando los grupos de pensamiento y manipulando comportamientos.
Características:

  1. La diferencia entre información y desinformación es que, en el caso de la desinformación, el periodista ve comprimida su labor y se convierte sólo en un vocero entre el poder y la sociedad.
  2. La desinformación se basa en la psicosociología y se inspira en la publicidad y recurre a todos los medios de comunicación a su alcance.
  3. Sus usuarios son los detentadores del poder.
  4. Sus intenciones son:
  • Disimular una iniciativa militar (recordemos que el concepto se desarrolló en tiempos de guerra), diplomática o económica.
  • Desacreditar a una personalidad.
  • Crear dificultades a un Estado.
  • Manipular a la opinión pública.


Caso práctico:
Como el caso del metro de Valencia creo que se iría más al terreno de la ocultación de información, porque en el resto de España no nos enteramos hasta que el programa Salvados lo contó, vamos con un caso más reciente: las protestas del barrio de Gamonal (Burgos).
¿Cuánto tardaron los medios de comunicación en empezar a informar de lo que estaba pasando en Burgos? TVE, por ejemplo, empezó a hacerlo tras la segunda noche de disturbios, el 12 de enero. Además, las informaciones eran incompletas porque antes de Navidad ya existía una plataforma en contra de la construcción del Bulevar y prácticamente no se habló de ello. Informativos de televisión y prensa, además de empezar a informar tarde y mal, se centraban en la violencia de una forma casi sensacionalista, criminalizando la protesta.
Un análisis muy completo de la actuación de los medios lo podéis encontrar aquí. En este caso, punto para las redes sociales: fueron más rápidas y en Twitter muchos ya estábamos al tanto de que algo estaba pasando en Burgos cuando los medios empezaron su labor.
¿Conoces más casos de desinformación?