El Gran Premio de Brasil de Fórmula 1 apretó todavía más las cosas en el Campeonato del Mundo de pilotos con la victoria aplastante de Sebastian Vettel (Red Bull), la segunda posición de su compañero de equipo Webber y el podio de Fernando Alonso (Ferrari).
Mientras el título de constructores ya es matemáticamente de Red Bull, el mejor piloto de F-1 se determinará el próximo 14 de noviembre en la carrera de Abu Dhabi: si Webber gana y Alonso cruza la bandera de cuadros en segunda posición, el asturiano celebraría el tercer Campeonato del Mundo de su carrera. La fiabilidad del coche y la habilidad sobre el asfalto despejará la duda del año.
Fernando Alonso quedó satisfecho después de marcar el quinto mejor tiempo en la sesión de entrenamientos oficiales del sábado: “será bonito ver la pelea de los candidatos desde atrás”; y Fernando Alonso quedó más contento todavía después de subir al podio en el Gran Premio de Brasil consciente de que su principal rival, Webber, tampoco había ganado la carrera puesto que Vettel había sido el más rápido. El alemán feliz por ser primero, el australiano contento por seguir ‘vivo’ en el Mundial y el español feliz por llegar a la última carrera siendo líderl del Mundial. Todos contentos.
Hulkenberg partía desde la primera posición en el Autódromo José Carlos Pace tras una sorprendente pole que nadie esperaba. Las casualidades no existen en la F-1 porque todo está perfectamente medido. El canguelo de unos y la estrategia de otros provocaron la pole más inesperada de la temporada. El más inteligente fue Fernando Alonso (como siempre) ya que dejó a los dos Red Bull juntos (esperando que también revueltos) con Hamilton de escudero y un inexperto comandando el trenecito. Dinamita pura y dura que no terminó de explotar cuando el semáforo se apagó. Vettel salió como un tiro y Webber siguió su estela mientras que el invitado de última hora taponaba a Alonso.
Los Red Bull se escaparon y adquirieron un ritmo de carrera que nadie esperaba. Alonso supo deshacerse de Hamilton pero tardó demasiado en apartar de su camino a Hulkenberg y la distancia entre los Red Bull y el Ferrari resultó suficiente para el doblete del equipo de Christian Horner, que certificó el título Mundial de Constructores a falta de una carrera para el final de la temporada.
Alonso apretó los dientes en la parte final de la carrera, más que para acercarse a Vettel para poner nervioso a Webber. La presión que ejerce el asturiano sobre sus adversarios es el jugador número 12 del F-10. Alonso se acercó pero sin opciones de rebasar a su principal rival en el Mundial de pilotos: Marc Webber.
Todo se decidirá el próximo domingo 14 de noviembre, en la última prueba del Mundial en el Gran Premio de Abu Dhabi. Tres pilotos tienen opciones: Vettel, Webber y Alonso. El británico Hamilton tiene opciones remotas porque necesitaría un primer puesto y un abandono del resto de candidatos, algo tan improbable como la pole position de Hulkenberg. Tomen nota.
¿Qué quiere decir esto? Si Alonso sufre alguna avería mecánica Vettel y Webber estarían disputándose el Campeonato del Mundo con el cuchillo entre los dientes y sin lazos de deportividad. ¿Qué quiere decir esto? Nadie puede profetizar sobre la fiabilidad del monoplaza y hasta el último giro de la carrera Vettel tendrá tantas opciones como Webber en convertirse en campeón del Mundo, lo cual puede originar algún capítulo como el de Turquía y facilitar las cosas a Fernando Alonso. ¿Qué quiere decir esto? No te puedes perder la carrera del domingo.
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