A uno cinco kilómetros de Goreme, separado por un valle de chimeneas de hadas, se encuentra la localidad de Uchisar.
Es un lugar muy particular pues tiene partes muy antiguas, de los primeros siglos, otras no tan lejanas en el tiempo y algunas construcciones modernas.
Es quizás una de las mayores concentraciones, en Capadocia, de casas construidas en las rocas.
La llamada Fortaleza de Uchisar es una montaña horadada como un hormiguero, lleno de túneles y pasadizos interconectados.
En los laberintos de la fortaleza se tienen puertas con piedras redondas de molino que permiten clausurar las entradas.
De este tipo de bloqueo de puestas se tienen en la cercana ciudad subterránea de Kaymakli.
Muchas áreas del interior no están habilitadas para recorrerlas porque la erosión fue destruyéndolas, otros lugares internos son usados como palomares para recolección del guano utilizado en los cultivos
A lo lejos se destaca otra fortaleza que forman las vigías de la región, la de Ortachisar.
Son sumamente llamativas y las ciudades se fueron formando en torno a ellas.