Sé que en Almería se han rodado cientos de películas pero yo me había quedado en las del oeste. Hace unas semanas buscando un destino dónde pasar un finde, mi amiga N. comentó "¿Por qué no miramos en Almería? Está cerca y podíamos acercarnos a la playa de Mónsul. Es una playa superchula, volcánica, que seguro que a Marco le encanta. Allí rodaron una parte de Indiana Jones." En el momento en el que nombró la película supe que sería nuestro destino. El gen friki de nuestra familia no podía dejar de pasar la oportunidad de hacernos fotos en esa playa. Estaba segura de que al papi le gustaría la idea y más cuando vimos que el alojamiento nos salía baratísimo y que en dos horas y media estaríamos en el hotel.
Preparamos todo lo necesario y pusimos rumbo a Vera, dónde nos íbamos a hospedar en un apartamento. Los apartahoteles me gustan porque suelen ser más baratos (sobretodo en temporada baja), más amplios para alojarnos a todos juntos y nos permite ahorrar mucho en comidas. La parte "mala" es que a veces los desayunos se alaaaaargan al no tener un horario y claro, acabamos saliendo del hotel a las mil. Pero bueno, eso tampoco está mal del todo. De vez en cuando apetece tomarse las cosas con calma. Total, que me enrollo, que dormimos en Vera y a la mañana siguiente fuimos a conocer la famosa playa.
"La playa de Mónsul es una de las más famosas del Parque Natural de Cabo de Gata precisamente por haber aparecido en multitud de películas y anuncios comerciales. Debe su singularidad a las formaciones de lava erosionada que la rodean, a la belleza de su arena fina y a su agua cristalina. En ninguna otra parte del Parque Natural queda mejor reflejado el origen volcánico del mismo. Las rocas que rodean la playa de Mónsul son enormes lenguas de lava que llegaron hasta el mar y que el agua y el viento han ido erosionando para formar esta playa.fuente: cabodegataalmeria.com"
En esta playa no encontraréis baños, ni chiringuitos, ni nada parecido (tampoco en ninguna otra del parque natural, supongo). Junto al parking sí había una construcción que alberga baños y un puesto de socorro pero también estaba cerrada en estas fechas.
Se accede a través de un camino de piedras y tierra que no ayuda mucho para ir con el carro. Nosotros nos lo llevamos arrastrando pero pensad que si no es un carrito todoterreno os va a costar mucho. Y en la arena de la playa... ni os cuento.
Al llegar vimos se distinguían perfectamente las lenguas volcánicas (el color, la forma...). Conocer esta playa me sirvió para poder hablar con los peques sobre los volcanes y la erosión de los elementos. Poder aprender algo a la vez que te diviertes es fantástico, ¿no?
Hicimos fotos, los peques jugaron con la arena, cogimos conchas, vimos ovejas, hicimos más fotos, nos pusimos el gorro, cogimos el paraguas, echamos unas risas, hicimos friki fotos... Vamos, que nos lo pasamos muy bien. La pena fue que hacía muchísimo viento y eso no permitía que el estar en ese lugar tan bonito fuese del todo agradable.
Casi sin darnos cuenta se nos hicieron las dos de la tarde y aun teníamos que llegar a Almería. La tarde la íbamos a aprovechar para ver la Alcazaba. Pero eso... ya os lo cuento otro día.
Si queréis ver más fotos solo tenéis que pinchar aquí.
Localización exacta:
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