Después de un peligroso camino por la M-506 con las cadenas puestas, llegué a Moraleja de Enmedio, el pequeño pueblo del sur de Madrid donde vivo, todo estaba nevado, la nieve había dejado de caer y el silencio que reinaba en las calles era relajante…
… En Moraleja llevaba ya unas 7 horas nevando y paquetón de nieve era muy grueso, los tejados de los chalets soportaban bastantes kilos de nieve en polvo…
… Los parques y jardines presentaban una estampa de lo más gélida y se hacía imposible caminar si no se llevaba el calzado adecuado debido a las placas de hielo que iban apareciendo debajo de la gruesa capa de nieve en polvo…
…La parroquia de San Millán en Moraleja de Enmedio presentaba este aspecto, cubierta de nieve hasta el campanario y los arbolas que la envuelven blancos soportando el peso de los copos caídos durante toda la tarde…
…Nada se salvaba de estar cubierto de nieve aquella noche, la M-413 que pasa paralela a la parroquia de San Millán estaba cubierta de nieve y era obligatorio el uso de cadenas…
…El puentecito de la M-413 que salva el arroyo de Moraleja siempre está seco hasta aquella noche que se cubría de un manto de nieve…
… El en la plaza donde se sitúa el ayuntamiento de Moraleja, la nieve era abundante y unos chicos estaban haciendo un muñeco de nieve de gran tamaño…
… El carro que adorna la rotonda entre la calle Madrid y la calle Leganés en vez de soltar arena, esta vez soltaba nieve, un manto blanco cubría el césped de una de las rotondas más bonitas de Moraleja de Enmedio…
Las nevadas siempre ofrecen estampas muy bonitas, pero hay que tener cabeza, salir preparado a la calle, con ropa de abrigo, intentar no coger el coche y si no queda opción salir con las cadenas por si es necesario utilizarlas…
Espero que os haya gustado, tenéis más fotos en este set de flickr: Nevada 2010 en Madrid