Fractura del quinto metatarsiano

Publicado el 08 noviembre 2015 por Esferatextual

Todos los que realizan deporte están expuestos a posibles lesiones que van desde una simple aparición de un hematoma hasta una fractura completa de un hueso. Hay una lesión muy común entre los deportistas y que debes tener en cuenta para tomar las precauciones o saber que hacer si algún día sucede.

El quinto metatarsiano es un hueso ubicado en la zona del pie y que se conecta con el hueso del dedo meñique. A pesar de tener un tamaño pequeño, este hueso es importante para poder realizar movimiento en las actividades rutinarias y físicas. Hay dos tipos de fractura del quinto metatarsiano:

  • Fracturas de avulsión: Esta ocurre cuando un pequeña parte del hueso es arrancada fuera por un ligamento o un tendón. En su mayoría esto se da en consecuencia de una distorsión del tobillo. Es el tipo de fractura que suele ser olvidada o descuidada al saber que sucedió un esguince al tobillo dejando de lado la posible amenaza de una fractura del quinto metatarsiano.
  • Fractura de Jones: Es la más compleja y frecuente entre todas, porque al estar ubicada en una pequeña parte del quinto metatarsiano y al no haber en dicha zona una buena llegada de sangre, la fractura tendrá un proceso de curación muy lento.

Esta fractura de Jones se pueden dar por una rotura aguda, estrés del hueso o de un trauma (golpe). También pueden ser causadas por un exceso de trabajo o estrés reiterativo en la zona del metatarso. Como ya dijimos estas fracturas son frecuentes y más difíciles de tratar que las fracturas de avulsión.

 CAUSAS

Los que sufren de estas lesiones son las personas que entrenan deportes de contacto y que requieren mucha movilidad, así como también el exceso de trabajo en los pies. Entre ellos se encuentran los futbolistas, los que practican artes marciales, bailarines, entre otros. Las fracturas pueden ocurrir por un mal salto, especialmente en superficies irregulares, que originaría una mala caída sufriendo la ruptura del hueso.

También puede darse por un golpe directo en la zona del metatarso; los cambios de dirección de manera brusca pueden llegar a originar esta lesión. El hecho de tan solo correr puede genera dicha fractura, eso no quiere decir que no hay que correr, pero estos casos se dan pocas veces y dependiendo de la situación en ese momento del paciente.

SÍNTOMAS

El síntoma más frecuente es el dolor inmediato en la zona afectada y que viene acompañado con una hinchazón, para luego aparecer un hematoma. La rigidez del pie se da rápidamente de haber sucedido la fractura. Luego de haber pasado por esto, la característica fundamental que aparece en no poder apoyar el pie contra el suelo. La sangre que sale del hueso roto, dentro del pie, hace que se hinche, logrando dar un aspecto diferente al pie.

TRATAMIENTO

Es necesario tomarse unas placas o rayos x para ver el estado del pie y verificar qué tipo de lesión ha sido. Es importante no dejar pasar mucho tiempo. Ir al traumatólogo para la revisión del pie y que nos indique el diagnóstico, es vital.

Luego de saber la magnitud de la fractura, ya sea una rotura total o una fisura del hueso con desplazamiento o sin desplazamiento, las recomendaciones del doctor serán:

  • Descanso absoluto, no pudiendo cargar ni hacer ningún esfuerzo que involucre al pie afectado.
  • El yeso será la mejor solución para el proceso de sanación del hueso. Esto depende de la gravedad de la lesión, en caso no fuera tan grave sería suficiente con inmovilidad por un par de semanas y una tobillera de sujetador.
  • Si fuera una rotura completa del hueso el proceso de curación será más largo y complejo. Hay dos maneras de llevar a cabo el proceso de curación. Con una intervención quirúrgica, se que basa en introducir un tornillo o clavo para unir las partes rotas y que el proceso de recuperación se acelere. También se puede optar por el yeso y sus diferentes calidades en el mercado; el proceso de curación con yeso será más lento que el proceso quirúrgico.
  • Después de la etapa de consolidación y aparición de callo óseo, se pasará a un terapeuta para que continúe el proceso de volver a restablecer los movimientos completos de los músculos y tendones inmóviles durante la etapa del yeso.