Ayer, para los más de mil millones de católicos que rondamos por las tierras medias fue un día grande; y más aún para los argentinos, que de buena tinta se que sois muchos los que desde allí seguís las andaduras de este blog.
Al final el nuevo pontífice ha sido Francisco ( I ), un papa americano, jesuita, hispano y cercano a los pobres, con una manera asceta de ver y vivir la vida; una revolución dentro de la iglesia católica y una puerta abierta a la esperanza de los millones de necesitados que en latinoamérica ven su vida truncada día a día por culta de sus corruptos y populistas dirigentes.
Desde aquí mis más sinceras felicitaciones a los lectores argentinos, latinoamericanos y católicos en general.