La clásica novela de Mary Shelley ha sido adaptada al cine de formas muy diferentes. Desde la Universal a la Hammer, y otros muchos anteriores y posteriores, buscaron la esencia del monstruo original u optaron por mostrar su lado más salvaje y violento. Esta segunda opción es la elegida por el director Bernard Rose, situando al personaje en el presente, y mostrándolo como víctima antes que como verdugo. El inicio aporta un nuevo enfoque que convierte la cinta en una "road movie" de aprendizaje de la criatura en un mundo hostil. La realización plana y algunas incoherencias del guion no impiden que agradezcamos el intento.Puntuación: @tomgut65: 5/10