La filosofía pianística
de Chopin
Chopin es tal vez el unico gran compositor cuyo desarrollo puede ser considerado unicamente a traves de su produccion pianistica. Esto no limita su alcance, desde luego, sino que establece el territorio especifico de sus extraordinarias investigaciones musicales.La filosofia pianistica de Chopin queda establecida bastante tempranamente, ya desde la primera serie de los Estudios op. 10. Los estudios pianisticos de la epoca de Biedermeier tenian generalmente un caracter mecanico y propedeutico, de preparation para otra cosa; constituian un genero instrumental en el doble sentido del termino.Pero con Chopin el status expresivo y musical del estudio pianistico no difiere respecto de generos "subjetivos" como el impromptu o el preludio. Las dos series de Estudios de Chopin pueden ser consideradas como el punto de partida de una tradition de largo alcance, enriquecida especialmente por Debussy y, mas recientemente, por Gyorgy Ligeti.
Análisis de Los estudios de Chopin
No buscan tanto un mecanismo como una sonoridad.
Piero Rattalino analiza agudamente algunos casos en su "Storia del pianoforte".
El Estudio op. 10 N° 2, por ejemplo, donde los dedos medio, anular y menique que tocan la escala cromatica deben atacar la tecla necesariamente en position transversal, ya que el pulgar y el indice sostienen acordes de dos notas.Al variar el modo del impacto, varia el timbre. De otra forma, el Estudio Op. 10 N° 4 seria seguramente muy distinto si estuviese escrito en Do Menor: su tonalidad de Do Sostenido Menor, con la mano en una position mas alta, requiere una soltura de dedos y, por decirlo asi, un tipo de aleteo que proporciona una sonoridad particular.Una sonoridad de volumen no demasiado grande, lo cual seguramente tambien podria explicar la mala relacion de Chopin con la orquesta.
Chopin Etude op.10-12
Chopin Etude op.10-12 "Revolutionary"
Pero no es necesario recurrir a su correspondencia o a su biografia para comprobar la problematica relation con la orquesta de Chopin; basta escuchar sus piezas concertantes: la orquesta es simplemente algo que 'esta ahi"; mas bien asordinado.La musica de Chopin se aleja de las formulaciones clasicistas y de la forma concertante. Tambien el mundo de la sonata le es ajeno; seguramente no solo por cierto caracter directional que la musica de Chopin -mucho mas cerca de Schubert que de Beethoven- evita naturalmente, sino tambien por ciertas cristalizaciones de escritura que la sonata condensa especialmente hacia la primera mitad del siglo XIX.
La musica de Chopin tiene una trama melodico armonica compleja, de relevamiento continuo. Basta comprobar la funcion melodica de la armonia en el Preludio N° 4, sobre esos minimos y pregnantes movimientos de la voz superior, o la forma del bajo en el Preludio N°2, que no responde a un encadenamiento armonico y que mas bien esta pensado en contra de toda progresion, como un golpe de baston obstinado y persistente, aunque Ganche vio en esos sonidos "las campanas desentonadas de la campina polaca cubierta de nieve". Los imagenes generalmente intentan explicar las rarezas musicales. Pero el vocabulario de Chopin es parco en imagenes y en programas literarios; prefirio atenerse sobriamente a la mera enunciation de los generos. Sus Baladas, termino desusado en musica hasta el momento. tienen tal vez un origen literario, las Baladas y Romanzas de Adam Mickiewicz, pero la referencia es exclusivamente generica.
Hay relevamiento de las funciones armonico melodicas y tambien de las funciones ornamentales. Podemos tomar, de acuerdo con Rattalino, el caso del Estudio op. 25 K° 2, donde aparece un tipo de melodia en sonidos rapidos, todos de igual duration: "la linea continua y regular del estudio clasico -sostiene Rattalino- adquiere aqui un valor no ya ornamental sino expresivo jadorno que se vuelve relato!".La musica de Chopin experimenta un relevamiento de funciones musicales y retoricas y una reinvention de generos. Los 24 Preludios pueden tambien ser pensados como una replica genial de la obra que Chopin consideraba su pan tecnico y espiritual de todos los dias, "El clave Bien temperado" de Johann Sebastian Bach.
Por Franco Monjeau