Cooking the Chef no pudo haber elegido mejor chef para el último reto del año. Nada más y nada menos que Julia Child, de la que me gusta, creo que, casi todo. Y de la que envidio, si envidio, no vamos a maquillar este sentimiento, la oportunidad que tuvo, gracias al trabajo de su marido, de vivir en París y tener un contacto mucho más directo con la cocina francesa, entre otras cosas. ¡Ojalá me pasara a mí algo parecido!
En un pispás tenía elegidas las recetas que iba a cocinar: Fricasé de Pollo à l'ancienne, Cebollitas glaseadas à blanc y Champiñones à blanc. No me digáis que no suena bien. Si lo estoy escribiendo y estoy volviendo a salivar y eso que ya nos lo hemos comido.
Os lo podréis imaginar: varias tareas pre-navideñas adelantadas, alguna cosa de las listas de pendientes tachada, por fin un día 5 ha coincidido con que yo esté en casa ;-) y también un día 6 ¡y menos mal! Debéis estar pensando por qué digo estas cosas, pero si me entero a través del móvil que Cooking the Chef dedica diciembre a mi Julia Child y no tengo acceso a mis cosas ¡me da un algo!
Ya se lo dije a Aisha y April: ¡la podríamos dejar todo el trimestre!
El día 6 era domingo, y el 7, aunque festivo, el Mercado Central abría y nosotros allá que nos fuimos. El mercado más vacío que cuando voy los sábados. Mucha gente no sabía que abría, para otros era demasiado temprano y apenas había turistas, que últimamente casi son mayoría, cosa que no me extraña teniendo el mercado que tenemos.
En cuanto volvimos a casa, me metí en la cocina. A solas, el libro de Julia Child y yo. Fue un festival. Disfruté intensamente cocinando, pensando en mi adorada París, ¡qué ganas le tengo, ya falta menos! Me relamía sólo con los aromas, con el chup-chup, probando la salsa mientras la preparaba.
Llegó el gran momento. Abrimos uno de mis vinos preferidos, ahí no fui fiel a la sugerencia de la Child, y cuando probamos el plato … Mmm, no queda bien que yo lo diga, pero ¡qué re-bueno!
Al final Monsieur À Table dijo que había comido muy bien, mejor que cuando vamos a los restaurantes. No sé qué pensar, pero esta expresión últimamente me la repite mucho. Y yo .... más feliz que una perdiz. Ya sólo queda que destinen a Monsieur À Table un par de añitos a París y pueda yo disfrutar de una experiencia a lo Julia Child.
Difícil es, pero nunca se sabe. A ver si tengo suerte, me lee y capta la indirecta ;-)
INGREDIENTES:
Champiñones escaldados / Champignons à blanc
- 125 gr. de Champiñones
- 150 cc de Agua
- 1/8 Cucharadita de Sal
- 1 Cucharada de Zumo de Limón
- 1 Cucharada de Mantequilla
- 18 - 24 Cebollitas blancas
- 150 cc de Agua / Caldo de pollo (ver receta)
- 2 Cucharadas de Mantequilla
- Sal y Pimienta
- Atadillo de hierbas: Perejil, Tomillo, Laurel
- 1 - 1.25 Kg. de Pollo de Corral troceado
- 1 Cebolla grande
- 1 Zanahoria Grande
- 1 Rama de Apio
- 4 Cucharadas de Mantequilla
- 500 cc de Caldo suave de Pollo (ver receta)
- 125 cc de Vermut blanco
- Sal y Pimient
- 3 Cucharadas de harina
- Atadillo de hierbas: Perejil, Tomillo, Laurel
- 2 Yemas de Huevo
- 100 cc de Nata Líquida
- Unas gotas de zumo de limón
- Nuez Moscada
ELABORACIÓN:
Champiñones escaldados
- En un cazo poner a hervir el agua, el zumo de limón, la mantequilla y la sal. Añadir los champiñones cuarteados, dejar que el líquido los cubra y tapar el cazo.
- Dejarlo cocer a fuego vivo durante unos 4 min. removiendo de vez en cuando. Reservar por una parte los champiñones y por otra el caldo de la cocción.
Cebollitas glaseadas blancas
- En una sartén que pueda contener las cebollitas en una sola capa, poner las cebollitas, el caldo, la mantequilla, el atadillo de hierbas y salpimentar.
- Tapar y dejar a fuego muy lento durante 40 - 50 min. dándole la vuelta de vez en cuando. No se tienen que dorar pero deben quedar muy tiernas, sin que se deshagan.
- Si durante la cocción se evapora todo el líquido, añadir un poco más de caldo. Retirar el atadillo y reservar las cebollitas.
Fricasé de Pollo a la Antigua
- Picar la cebolla y cortar a rodajitas muy finas la zanahoria y el apio, cuanto más finas mejor, así casi desaparecerán en la salsa sin necesidad de pasarla por un colador.
- En una cazuela poner un chorrito de aceite y la mantequilla. Cuando se derrita, añadir la cebolla, la zanahoria y el apio y rehogar a fuego lento hasta que estén tierna, pero sin que lleguen a dorarse.
- Apartarlas hacia los extremos de la cazuela, avivar el fuego e incorporar el pollo. Dejar unos 3 - 4 minutos, dándole la vuelta cada minuto hasta que adquiera un color dorado claro.
- Reducir el fuego, tapar la cazuela y dejar 10 min. a fuego muy lento, dándole la vuelta a los trozos de pollo de cuando en cuando.
- Salpimentar el pollo y espolvorear con la harina. Darles unas vueltas para que la harina se integre y se vaya cocinando. Tapar la cazuela y cocinar lentamente 4 min. más dándole una vuelta en este tiempo.
- Apartar la cazuela del fuego y añadir el caldo hirviendo. Remover para que la harina ligue bien con el caldo. Añadir el vermut y el atadillo. El pollo debe quedar cubierto, por lo que si hiciera falta, añadir más caldo. Dejar a fuego lento y rectificar de sal si fuera necesario.
- Tapar la cazuela y dejar unos 30 min. a fuego muy lento. Los muslos de pollo deben quedar tiernos y el jugo adquirirá un color amarillo claro. Cuando esté listo, reservar los trozos de pollo en una fuente.
(Mientras el pollo se hace podemos preparar las cebollas y los champiñones.)
- Pasamos a elaborar la salsa. Añadimos a la cazuela el caldo de la cocción de los champiñones y dejamos que todo el líquido hierva para que se reduzca y espese hasta formar una fina capa. Obtendremos unos 300 - 400 cc de líquido.
- En un bol de unos 2 l. de capacidad, mezclar las yemas y la nata líquida con un batidor de varillas. Ir agregando poco a poco la salsa, primero a cucharadas y luego a chorritos, mientras batimos bien.
- En un cazo verter la salsa y a fuego más bien fuerte, darle vueltas con una cuchara de madera, alcanzando el fondo y los laterales para que no se pegue. Cuando rompa a hervir, dejar 1 min. más sin dejar de remover y después retirar del fuego.
- Añadir el zumo de limón y rallar un poco de nuez moscada. Se puede pasar por un colador, pero en este caso no lo he hecho.
- En una cazuela limpia disponer los trozos de pollo, los champiñones y las cebollitas. Regarlo todo con la salsa. Poner la cazuela a fuego lento. Tapar y dejar al borde del hervor unos 5 min. hasta que el pollo se haya calentado, rociándolo, de vez en cuando, con la salsa.
- Servir el pollo en la cazuela o en una fuente precalentada. Acompañar con arroz y unas ramitas de perejil fresco.
Et comme Julia Child dit: Toujours Bon Appétit!