Frikiñaki 10 - Estado de defensa...

Publicado el 19 mayo 2013 por Kushif

(Capítulo anterior)

CAPÍTULO DIEZ:
Estado de defenza…

¡Cómo pasa el tiempo! Ya estáis ahí, al otro lado de la pantalla del ordenador, esperando que ilumine vuestro penoso deambular por la vida con mi infinita sabiduría… No os preocupéis, pues la historia de esta semana, aparte de ser amena y estar bien contada, como no podía ser menos, instruye, y de lo lindo. No voy a prolongar más vuestro estado de  ansiedad y empiezo presto la función.

Todo empezó la semana pasada, en la cual, después del funesto suceso de la lavadora, mi compañera de piso se encontraba digámoslo finamente, un poco resentida con mi persona. Aunque no lo consideraba necesario, estuve maquinando diferentes maneras de congraciarme con ella, pero ninguna me satisfacía plenamente. Así que en esas andaba cuando escuché, por pura casualidad, una conversación de Leia con su familia. En ella les contaba que se encontraba un poco triste por no poder ir a celebrar con ellos el cumpleaños del padre por motivos de trabajo, y que cuánto echaba de menos las cenas familiares. Y ahí se me encendió la bombilla. ¡Qué mejor manera de mejorar las cosas con ella que prepararla una cena! Aparte de animarla, al parecer este tipo de cosas les suele parecer muy atractivas a las mujeres, lo cual quería decir que con un poquito de suerte, un mucho de alcohol y su estado cuasi-depresivo, las posibilidades de llevar mi relación con ella a un plano mucho más físico aumentaban notablemente.

Después de un somero análisis, sólo veía dos escollos insalvables: el primero, su reticencia a aceptar todo lo que viniera de mi parte, y el segundo, que no tengo ni idea de cocinar. Decidí concentrarme en el primer punto, y con una astucia digna de Obi-Wan –Kenobi empecé a camelármela.

-   No he podido evitar oír parte de tu conversación, y me gustaría, como señal de paz, que me dejaras prepararte una cena para mitigar un poco tu soledad.

-   ¿Qué has escuchado qué? ¡Si estaba con la puerta cerrada! Eres un cotilla asqueroso.

-   Ya, pero con tu tono de voz tan alto, y ya sabes, las paredes de hoy día son de papel…

-   Esta casa tiene más de 40 años. Además, como vas a preparar tú una cena, si tú dieta consiste en pizzas, nachos con queso y 7up.

-   Uhhhh, habló la Ferrán Adriá  de la comida pre-cocinada. Con los envases  de conservas y platos preparados que te has comido en los últimos tiempos podríamos montar una nave para hacer ida y vuelta a Marte y nos sobraría para forrar este edificio.

-   No intentes convencerme. Te he dicho no y basta.

Me di cuenta de que era el momento de jugarse el todo por el todo, y cual Bilbo Bolsón con el Gollum saqué mi as de la manga, sabiendo que iba a ser irresistible, que una fuerza mayor que su voluntad iba a hacer que aceptara.

-   Muy bien, si no me dejas más remedio te haré una oferta que no podrás rechazar (esto queda muy güay con la voz de Marlon Brando en el Padrino. Leia dice que soy patético cuando le imito, pero sé que en el fondo le gusta).Si dejas que cocine para los dos y no te gusta la comida me desharé de mi casco de Darth Vader edición limitada, el que dice:”Luke, yo soy tu padre” y esas frases tan chulas.

Leia se me quedó mirando fijamente, como intentando comprobar si iba en serio, y después de cabecear un rato como un perrito piloto dijo las palabras más dulces que había escuchado de su boca hasta ese momento.

-   Vale, acepto. Pero ten bien claro en todo momento que esto no es una cita. Este próximo viernes cena en casa preparada por ti. Y que Dios nos coja confesados…

Viernes.  Estábamos a lunes, cuatro días para mi glorioso triunfo…esto marchaba.

DEFCON UNO

El martes pasó rápido, y el miércoles fue un suspiro acompañado de Súper Mario. Todo estaba bajo control, el mundo giraba al son de la música que yo tocaba hasta que el jueves por la mañana el meteorito de Armageddon cayó en mi vida con la mala suerte de no tener un Bruce Willis para que me salvara.

En efecto, estaba yo tan tranquilo jugando con la Wii cuando Leia pasó a mi lado.

-   Muy tranquilo estás para el poco tiempo que te queda. ¿Qué, has pensado ya en el fastuoso menú que me vas a ofrecer?. Espero que no seas tan cutre como para encargar la cena en un  restaurante e intentar colármela como hecha por ti, como sale en las películas…

Touché. Había descubierto mi plan antes de ponerlo en marcha. Maldita sea, tenía que haberme dado cuenta de que estas cosas salen mucho en las comedias románticas que tanto la gustan.

-   No, no, ni se me había ocurrido ( en cierto modo no era del todo mentira, ella había dicho un restaurante y yo iba a traer la cena de dos restaurantes diferentes, para tratar de borrar el rastro por si acaso). Mañana por la noche estate preparada para paladear una delicia desconocida por ti.

-   El viernes por la noche lo único que paladearé será mi victoria y tu humillación.

Y en ese momento se me heló la sangre. Necesitaba un plan B, pero ¿Cuál? Al final la respuesta fue obvia: ¿A quién recurre un joven cuando se marcha de casa de sus padres y tiene un problema?  En efecto, a sus padres, en concreto en este caso a mi madre. Volvíamos a la partida…

Como esto se me está haciendo un poco espeso, el final de la historia la dejaré para la próxima semana: ¿conseguiré culminar mi relación con mi amada? ¿Perderé la cabeza, o en este caso el casco de Darth Vader? ¿Hay alguien por ahí que me pueda prestar un buen libro de cocina?…

Queridos lectores, os prometo que la próxima semana habrá drama, tensión, intriga, sexo… bueno esto último no, pero era para ver si picabais. Hasta entonces, saludos desde las lunas de Endor y que la fuerza os acompañe.

…to be continued.