Aunque viendo el título del artículo no me creáis, no me gustan las comparaciones de series nuevas con ‘Lost’, ni que aún se hable tanto de la serie (sobre todo por chorradas como los números y la lotería). ‘Lost’ fue muy grande, pero ya pasó y ahora es tiempo de nuevas series.
Pero viendo ‘Fringe’ no puedo olvidarme de ‘Lost’. No es porque tenga el mismo creador, ni porque tengan géneros comunes, si no por lo que me está pasando lo mismo que con la antigua serie de la ABC. Al ver ‘Fringe’ siento como un dejavú, pienso que eso ya me ha pasado.
Me explico: empecé ‘Lost’ por casualidad viéndola en verano en Sony Entreteiment Television. La primera temporada me engancho y me absorbió. Pero llegó la segunda temporada y abandoné la serie. Gracias a la insistencia de un amigo, la dí una segunda oportunidad, y ahí llego la tercera temporada, la buena, la que logró ganarse un hueco en mi corazoncito seriefilo. Logré ponerme al ritmo americano, y así, descargándome los capítulos cada semana de donde podía, acabé la serie.
Y con ‘Fringe’ fue todo casi igual. Capítulos finales de la primera temporada me engancharon, pero llegó una segunda temporada que no me acababa de convencer. Pero gracias a twitteros y blogueros, seguí con la serie, y acabé la segunda temporada, pero aún sin estar totalmente enganchado
Pero llegó la tercera temporada. Y menuda temporada. Y me enganchó, me absorbió y se ganó un lugar al lado de la antigua serie de los chicos de la isla. Y hoy por fin llegó el día en que me puse a ritmo americano.
Ahora tocará ilusionarse cada Sábado por la mañana. Rezar para que la serie no pierda audiencia. Sufrir en Mayo para ver si renuevan la serie. Y, esperemos que por mucho tiempo, seguir disfrutando con Olivia, Peter y Walter.
Si, todo esto para anunciar que por fin voy a ritmo americano con Fringe.
Ojalá tenga un final, y sea como el de ‘Lost’, que nos hizo madrugar y sufrir hasta el final. Me da igual que sea un buen final o un mal final. Pero , por favor señores de la FOX, que tenga final.