La película es muy estilo clásico Disney: dos hermanas que se quedan huérfanas y la mayor, Elsa, tiene un don muy poderoso que le cuesta controlar. Hasta que en el día de su coronación, pierde los estribos y congela el reino. He comentado con gente que la ha visto y parece ser que no ha gustado mucho, pero qué queréis que os diga, a mí, me gustó. Las dos protagonistas principales sí que es cierto que son algo sosainas pero como contrapunto tenemos al reno Sven y al muñeco de nieve Olav, que es hípersúpermegaachuchable. Su mayor deseo es vivir en la primavera para poder oler las flores y cada dos por tres no sé cómo se lo monta pero se me descuajaringa. Aún así, creo que hace tiempo que no me reía tanto con un personaje de Disney.
Y en cuanto al mensaje que transmite, parece que la gran productora de películas infantiles empieza a cambiar el chip (¡menos mal!) y fomenta sobre todo el amor fraternal.