Fuentes de contenido en sitios sociales corporativos

Publicado el 28 abril 2015 por Davidsoler @dsoler

He hablado varias veces, y defendido siempre, que lo más difícil en Social Media Marketing es la creación de contenidos. Por esa razón también he defendido que el contenido, siendo el vehículo que te posiciona tanto desde el punto de vista digital como de marketing, puede (y debe) salir de diferentes fuentes. Y es así porque, salvo que seas una corporación con suficientes recursos, vas a necesitar recurrir a terceros porque llenar todos los sitios corporativos (blog y redes) con contenido creado es casi imposible (no cuenta la web corporativa o la tienda online, obvio).

Así que empezaremos con una lista de temas que contenga el contenido que nos posiciona y que estamos seguros que es el que busca nuestro usuario. Una vez tenemos la lista ya solo falta buscar donde encontramos ese contenido o como lo creamos. Y no hay que olvidar que hay contenido que no encaja en todos los sitios sino que es mejor para una red que para otra.

El contenido que crearás es el que irá a tu sitio principal, un blog por ejemplo (que es lo habitual pero no tiene porque ser así). Pero ¿como haces para llenar Twitter 4 veces al día, Facebook 2 y LinkedIn una? Necesitas saber quienes pueden proveerte del contenido que la marca no es capaz de crear. Aquí listo 7 fuentes fuentes de contenido y la lógica de una parte de la política de contenidos:

  1. Utilizar un lector de feeds para incluir, y por categorías distintas, una lista de blogs, portales y periódicos.
  2. Subscribirse a canales/cuentas de redes sociales. Por ejemplo, un canal de Youtube, una cuenta de Slideshare o un grupo de LinkedIn.
  3. En las redes tener listas de fuentes (cuentas) por temas. En Twitter y Facebook es muy sencillo e intuitivo porque tienen esa funcionalidad incorporada. Revisas cada día lo que se ha publicado y ves que cosas vas a recompartir en ese y otros sitios.
  4. Se podría crear un periódico con paper.li o una herramienta similar y ella misma cura el contenido que después se usará para los distintos sitios sociales de la empresa.
  5. Subscribirse a una agencia de noticias online, u offline, tipo comunicae.es o easypress.es.
  6. Hacer búsquedas por palabras clave de manera recurrente: en alertas de Google o de cualquier otro canal que genera muchas noticias y en la mayoría de redes (por ejemplo, podemos tener una columna en Hootsuite para buscar en todo Twitter).
  7. Sin olvidar todo el contenido que la marca puede crear de manera “accidental”: reviews de la asistencia a un congreso, fotos de una presentación de producto, el stand en una feria, reuniones internas de trabajo fuera del ámbito habitual, acuerdos de partnership, hitos…

Si tenemos claro los temas después ya pensaremos en el formato: vídeos, artículos cortos, frases motivadoras, tips, reviews,  vídeos, fotos, whiteparpers, etc.. o una mezcla de todos.

Con todo, al final te darás cuenta que podrías estar una semana compartiendo lo que has leído/visto en un día pero trata de ser selectivo y solo comparte lo que te parezca más interesante.

En resumen, el proceso para la búsqueda de  contenidos podría seguir este camino:

  1. Investigar que le interesa al target y hacer una lista de los temas.
  2. Definir del anterior cual creará la marca y cual se tomará “prestado” de sitios de terceros.  El creado es, normalmente, el contenido principal y más importante, el estratégico, así que lo reservaremos para el lugar estratégico (también normalmente una web o un blog).
  3. Seleccionar las fuentes y tener herramientas para hacer ese seguimiento de manera simple y eficaz.
  4. Ordenar y calendarizar el contenido es buscar si hay contenido que debe generarse y compartirse más en según que momento del año (Navidad, por ejemplo).
  5. Aprender a rotar y cruzar el contenido entre tus sitios. Por ejemplo: creas un video, lo subes y compartes desde Youtube. Al cabo de unos días escribes una entrada en el blog sobre el vídeo y le das una segunda vuelta. Luego haces lo propio en Facebook. Haces una versión corta para Instagram o Twitter. Y así hasta el infinito. Otro ejemplo sería hacer un álbum en Facebook o G+ y compartirlo después vía Twitter para que la gente se entere que existe allí también.

Y, al final, no hay que olvidar analizar cual es el contenido que más se comparte y más se visita en la web o el blog y cual es el que más se click y comparte del que no es propio. Lo primero con Google Analytics. Lo segundo con las funcionalidades de medición que tienen todas las redes sociales. El objetivo es saber y mejorar sobre que escribir y compartir. O qué formato y/o soporte funciona mejor.

¡Que tengáis una feliz semana!

Imagen del post extraída del blog de Atrevia.com