Por si alguien tenía alguna duda de que la Justicia de este país está a la orden de lo que podríamos llamar Oligarquía o el palco del Bernabéu, cuyos tentáculos se extienden mucho más allá del futbol, fijaros en los últimos ejemplos, que se añaden a la larga lista de demostraciones de cachondeo judicial hispano: Gurtels, Bankias, Blesas, Infantas, etc.
Resumiendo, el Ministerio Fiscal le pide al juez Pablo Ruz llevar a juicio penal al ex presidente del Barça Rosell y al propio club por delito fiscal y societario, y a pesar de que hace un año el actual presidente del club declaró lo realmente pagado por el fichaje de Neymar y depositó 13 millones en fianza de cualquier posible deuda con Hacienda, también exigen que se investigue al presidente Bartomeu por un posible delito fiscal en 2014, que como el anterior se basa en una cuestión de criterio muy discutible. Mientras tanto, y a pesar de que ya ha liquidado más de 50 millones Leo Messi sigue encausado, con la clara intención de que se canse y cada vez tenga más ganas de cambiar de residencia.
No se puede negar que el palco del Bernabéu le ha sacado muchísimo jugo a la denuncia de un histérico socio del Barça, que probablemente actuó por mando a distancia, pero curiosamente no se han interesado lo más mínimo por el hecho que entre lo que declaró haber pagado por Bale el Real Madrid y lo que dicen haber cobrado los Spurs y ha publicado la prensa inglesa hay una diferencia de bastante más de 20 millones. Será porque en Hacienda no tienen tiempo para dedicarse a todos los fraudes del futbol porque su inmensa lucha contra la defraudación y los ridículos impuestos que pagan las grandes fortunas del país les tiene muy ocupados.
Pero curiosamente, pero que muy curiosamente, el mismo día que la fiscalía echaba más leña al fuego del Barça, el mismo juez Pablo Ruz, ante la absoluta inoperancia del mismo Ministerio Fiscal que tan agresivamente actúa en el caso Neymar, ha tenido que insistir a Hacienda para que investiguen nada menos que tres delitos penales por el pago en B de las obras del edificio del PP en la calle Génova, caso en que podría ser que el industrial que cobró en B acabe pagando las consecuencias mientras Fiscal y Hacienda se están pensando si el PP tendrá algo que ver con el asunto.
Aunque quizás la indolencia de la Fiscalía y de Hacienda esté justificada porque al final el responsable será solo Luis Bárcenas que ya está imputado y acusado en multitud de casos por sus fechorías cuando actuaba con dinero del PP, en la oficinas del PP, bajo firma autorizada y apoderado del PP, con una contabilidad B que era de Bárcenas aunque curiosamente la usaba el PP con profusión, con coche y chofer del PP y siendo empleado del PP, pero en las que el PP no tuvo, ni tiene, ni tendrá la más mínima responsabilidad por total y absoluto desconocimiento. Y colorín colorado.
Estoy llegando a la conclusión que la única diferencia entre el Reino de España y la peor república bananera es que en la república bananera se preocupan por disimular un poco.
Pero nuestra Justicia tiene la misma calidad intrínseca en todos los ámbitos, de los más trascendentales a los más triviales. A Cristiano Ronaldo el Comité (unipersonal y con carnet del Real Madrid) de Competición le castigó con dos partidos por una agresión a un contrario que incluyó bofetón y patada con el juego detenido. En Alemania un comité similar pero con dos grandes diferencias: está formado por más de un miembro, y ninguno de ellos es un sinvergüenza falto de la más mínima seriedad, ha sancionado al holandés Huntelaar con seis partidos por propinar una tremenda patada por detrás a un contrario con la pelota en juego. Mi recomendación a Huntelaar es que procure fichar por el Real Madrid si quiere seguir jugando con la misma agresividad pero sin graves problemas.