Su estado contrastaba bastante con este otro ejemplar bastante más deteriorado que localicé a mediados de mes en los prados de Moniello.
Sin duda este segundo ejemplar es uno de los llegados a Gozón a principios del invierno, que se pudieron observar en varios puntos del concejo y de los que registré incluso una cópula. Es más que probable que se hayan reproducido y el ejemplar de Peroño corresponda a la nueva generación.
Esta reproducción de la mariposa cardera en invierno es un hecho excepcional. La cardera es un lepidóptero migrador, que en otoño-invierno tiene dos o tres generaciones en su zona sur, en África y el sur del mediterráneo, y en primavera-verano una única generación más a lo largo del continente europeo. A partir de mediados de abril o primeros de mayo es cuando comienzan a llegar a nuestras latitudes las que han nacido más al sur. Algunas primaveras la migración es masiva.