(Blog de Jorge Morelli).
FUGA DE TOLEDO.
Alejandro Toledo vino a generar un incidente que le permitiera alegar que en su caso se viola el debido proceso. En medio de gritos de ladrón abandonó el país diciendo por boca de su partido que está dispuesto a volver si se le respeta el derecho de defensa.
Toledo pidió venir al Congreso a hablar 20 minutos sin preguntas,para luego exigir que se le citara en otra fecha porque había venido sin abogado.
Nunca tuvo intención alguna de declarar al Congreso, porque su versión es inverosímil: que las propiedades de Casuarinas y Omega son de Maiman; que éste le prestó graciosamente medio millón de dólares sin intereses para cancelar sus hipotecas de Camacho y de Punta Sal; y que el préstamo de medio millón de dólares lo pagará con su sueldo. Ni la opinión pública ni la prensa ni el Congreso se tragarán jamás esa versión.
Que Toledo vaya a ir preso por esto es harina de otro costal. Vino para evitar la orden de arraigo. Su desesperación es por la fuga hacia adelante. Por eso, en pleno delirio, anuncia su candidatura y pretende usar a la pobre gente de su partido. Irónicamente, predijo su retiro si se le demostraba su relación con el andamiaje financiero en que involucró a su pobre suegra.
Toledo dice que no lo dejaron hablar. El Congreso le ha destapado la maniobra. Ha actuado correctamente al no aceptar que hablara en las condiciones en que pretendía hacerlo. Eso le habría permitido alegar que no hay debido proceso porque declaró sin presencia de un abogado.
Toledo no vive en Lima. Habrá creído que con su leguleyada y una sarta de mentiras frescas saldría del asunto. Los gritos de la gente en el aeropuerto le habrán hecho sospechar por primera vez el abismo en que se halla.
FUENTE: BLOG DE JORGE MORELLI. http://www.expreso.com.pe/blogs/jorge-morelli