Furia de titanes (Clash of the titans).

Publicado el 07 abril 2010 por Tomasrodriguez
Si nos toca bailar, lo mínimo que podemos esperar es que la música nos guste y si no, al menos, que sea resultona. Esto viene a cuento de que la nueva versión de Furia de titanes (Clash of the titans) que ha dirigido Louis Leterrier vendría a ser... como una canción del verano. Tiene un buen ritmo, es pegadiza y facilona. Con todos los elementos para gustar, pero -a un tiempo- totalmente superflua.
La historia es la de Perseo, un semidios que deberá de deberá de llegar hasta los confines del mundo conocido para buscar un medio de decantar la guerra que enfrenta a hombres y dioses que amenaza con destruir la ciudad de Argos.
Pienso que es un error intentar valorar una película como algo más que un entretenimiento. Desde esa perspectiva creo que cumple. La historia no se hace pesada, tiene buen ritmo, secuencias de acción y un par de cosas significativas. Una bastante humor (al menos más de lo habitual para este tipo de películas), que si bien no sirve para compensar lo vacío del dibujo de los personajes si los dota de algunas pinceladas bastante simpáticas. El otro aspecto tiene que ver con la figura de la mujer. Es interesante como hay un final, en cierto modo... atípico, en lo que se refiere al modelo femenino por el que (parece) apuesta.
Como decía es entretenida. La ambientación y los efectos especiales están bastante bien -ojo a la escena de los escorpines, filmada aquí, en Tenerife-, con unas referencias muy evidentes y dispares que irían desde la versión de 1981 de la historia (ojo al guiño del buho), pasando por Cloverfield, Alien, o Piratas del Caribe, que se unen a la mezcla de referencias mitológicas griegas (con unos dioses que parecen sacados de los Caballeros del zodiaco), musulmana (los djinn) oescandinava (el Kraken). Tampoco diría que los actores estén especialmente mal. Me llamaron la atención mucho un transformado Mads Mikkelsen, Gemma Arterton y Ralph Fiennes (me encanta como usa su cuerpo), ademas de un Sam Worthington, convertido en nuevo puntal, al menos del cine de acción.
Otra cosa es si se quiere analizar la historia, el guión es casi tan fino y transparente como papel de fumar y parece basarse, casi únicamente, en una sucesión de escenas de acción. De hecho el primer acto, la presentación de los personajes es rápida y hasta atropellada, para pasar a lo interesante, la acción; aunque algunas partes como la Medusa o el Kraken se cierran demasiado rápidamente. La acción, que a mi me ha recordado, mucho (y creo que no casualmente) al videojuego God of War.