Cada comienzo de año se realiza la habitual reunión de Comisión Directiva en AFA donde se tratan los temas de agenda que serán revisados a lo largo del año y se toman medidas para los meses restantes.
Cuando se esperaba que el tema principal sea el redibujo de los torneos y la posibilidad de eliminar los descensos, en la calle Viamonte sólo se resolvió una cosa: el aumento en el precio de las entradas para todas las categorías.
Con un porcentual del 25%, las populares de Primera pasarán a costar $50, diez más que en 2011. Este precio se mantenía inmutable desde el Apertura 2010, donde también habían sufrido un incremento similar.
Ahora, según ilustra Canchallena en su portal, Argentina se posiciona como el país más caro para ver fútbol en toda Latinoamerica. Lo que nos trae a colación un debate: ¿pagamos más para ver menos?
El nivel de nuestro país es malo, los partidos son más chatos y vemos menos goles, ¿corresponde pagar de más?. Es un planteo utópico, lo que no deja de ser real es que la relación precio/calidad es inversamente proporcional.
Ayer, consultado por este tema, Juan Román Riquelme aseguró en Indirecto:
”Si el fútbol es cada vez más malo, la entrada debería ser cada vez más barata”
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