Título: Gala-DalíAutora: Carmen DomingoEditorial: Espasa, 2016Páginas: 358.
Resumen oficial.
Esta es la historia de Gala Dalí, que llegó a Europa procedente de la Rusia de los zares y que acabó vanagloriándose de ser la única mujer capaz de sacar lo mejor de los hombres con los que se emparejaba.
Una mujer que siempre tuvo hombres — múltiples, variados, simultáneos, de distintas edades y procedencias, amigos de sus amigos y también enemigos, pintores, escritores, aspirantes a actores, nobles, plebeyos, ricos, pobres — a sus pies y, sobre todo, en su cama. Una mujer consciente de que para mantener el estatus económico tenía que permanecer casada, fuese o no fiel a su marido.
Una mujer que estuvo casada con uno de los genios más brillantes del arte universal: Dalí. Esta novela se basa en su tormentosa relación.
Impresión personal.
Museo Dalí
Muchas cosas me atrajeron de este libro en cuanto lo vi entre las novedades de Espasa. Lo primero que me llamó la atención fue la portada con ese gigantesco huevo que lo envuelve todo. ¿de donde vendría? ¿por qué ese huevo en la portada? Luego, he visto muchas fotos del Museo Dalí y de su casa donde los huevos destacan por todos lados, gigantes y blancos. Un mundo curioso y surrealista como el propio Dalí, pero original al máximo. Mi segunda curiosidad fue la pareja de Gala y Dalí en sí. Mis recuerdos de la infancia sobre Dalí, en el blanco y negro de la televisión, era la de un señor de apariencia de loco con bigote retorcido y ojos desorbitados que a mi me daba un miedo atroz. Siempre temía que se saliera de la pantalla de la televisión y que estuviera cerca. Sin embargo, de esa época no guardo ningún recuerdo de Gala y este libro me ha mostrado con total claridad la importancia que esta mujer tuvo en el desarrollo del artista. Desde luego, una pareja inolvidable, inhóspita, llamativa e irrepetible, no me cabe duda.En esta biografía novelada, muy amena por cierto, me he encontrado con una Gala a la que he odiado y a la que he admirado a la vez. La novela comienza cuando siendo aún niña y llamándose Elena Ivanovna Diakonova, cruza Europa en solitario desde su país natal, Rusia hasta el sanatorio de Clevedel en Suiza para recuperarse de tuberculosis. Allí conocerá y se enamorará del incipiente poeta Paul Eluard y ya en plena adolescencia se prometen amor eterno y volverse a reunir para casarse en Paris, a pesar de tener que abandonar definitivamente a su familia en Rusia y en contra de unos suegros a los que no gustaba la "rusa". Una relación siempre convulsa y supeditada a las extrañas orientaciones sexuales, muy surrealistas para el momento, de su marido, y a los deseos siempre insatisfechos de Gala por tener dinero en cantidades imposibles para un poeta y que vive de un negocio familiar. El ansia de Gala durante toda su vida por el dinero es algo que me ha llamado la atención toda la novela. Materialista al máximo, no tiene ningún escrúpulo en gastar continuamente lo que no tiene y en seguir dependiendo de su marido incluso cuando ya lleva muchos años viviendo con Dalí. Y Eluard, preso de esta mujer sigue financiando en la distancia a Gala, a pesar de que ésta ya no quiere nada con él más que su dinero y ha abandonado definitivamente a la hija de ambos, Cecile Eluard, a la que incluso al final de sus días deshereda.
Evidentemente, junto a Gala, llegamos a conocer a la perfección a Paul Eluard, su primer marido, poeta surrealista, con una extraña sexualidad, que idolatraba el desnudo de Gala y de la que nunca fue capaz de desprenderse a pesar de casarse con otra mujer posteriormente. Y Salvador Dalí, irrepetible. Un verdadero loco lleno de genialidad y excentricidades en todos sus actos. La novela cuenta también su vida en pareja, sus viajes, las diferentes excentricidades de Dalí que no dejan de hacerte sonreír durante toda la lectura y repetirte "está verdaderamente colgado".
En conclusión, he disfrutado muchísimo con esta biografía novelada. La historia de una época a través de una (en realidad, dos) pareja extraña que observa su entorno con otra mirada. Dos personajes, Gala y Dalí (y también Eluard) cuya vida, por surrealista y fuera de lo común, se torna diferente, curiosísima y muy entretenida, además de muy amena lectura por la sencillez de estilo y la fluidez del lenguaje que utiliza la autora.