Gracias al agudo y poderoso ojo en infrarrojo cercano del Very Large Telescope (VLT) de ESO, los astrónomos han descubierto una gran cantidad de polvorientas, jóvenes y masivas maternidades estelares en la cercana galaxia NGC 253. El centro de esta galaxia parece albergar un gemelo del agujero negro supermasivo de nuestra propia Vía Láctea. Astrónomos del Instituto de Astrofísica de Canarias (España) usaron NACO, un instrumento de óptica adaptativa con ojos de lince instalado en el VLT de ESO, para estudiar al detalle NGC 253, una de las galaxias espirales más brillantes y polvorientas del cielo.
La Óptica Adaptativa corrije el efecto borroso causado por la atmósfera de la Tierra. Esta turbulencia provoca que las estrellas titilen de una forma que encanta a los poetas, pero frustra a los astrónomos, ya que deteriora las imágenes. Con AO en acción el telescopio puede producir imágenes tan precisas como si, en teoría, el telescopio estuviese en el espacio. NACO reveló características de la galaxia que se encontraban en una extensión de sólo 11 años luz. “Nuestras observaciones nos proporcionan una resolución espacial tan detallada que podemos, por primera vez, compararlas con los mejores mapas de radio de esta galaxia, mapas que han existido por más de una década“, dice Juan Antonio Fernández Ontiveros, el autor principal del documento en que se reportan los resultados. Los astrónomos identificaron 37 zonas definidas y brillantes, tres veces más que lo detectado anteriormente, concentradas en una diminuta región del centro galáctico, que equivale a sólo un uno por ciento del tamaño total de la galaxia.
Los astrónomos combinaron sus imágenes de NACO con la información de VISIR, otro instrumento del VLT, así como con imágenes del Telescopio Espacial Hubble de NASA/ESA y observaciones de radio realizadas con el Very Large Array y el Very Large Baseline Interferometer. Combinar estas observaciones, tomadas en diferentes longitudes de onda, proporcionó una pista sobre la naturaleza de estas zonas. “Ahora creemos que éstas probablemente son zonas muy activas de formación de estrellas que contienen muchas estrellas irrumpiendo de sus capullos“, dice José Antonio Acosta-Pulido, un miembro del equipo. NGC 253 es conocida como una galaxia de estallidos estelares, debido a su intensa actividad de formación estelar. Cada zona brillante puede contener hasta cien mil estrellas jóvenes y masivas.
Esta exhaustiva serie de información lleva además a los astrónomos a concluir que el centro de NGC 253 alberga una versión aumentada de Sagittarius A, la brillante fuente de radio que se encuentra al centro de la Vía Láctea y que sabemos alberga un agujero negro masivo. “De esta forma hemos descubierto lo que podría ser un gemelo de nuestro Centro Galáctico“, dice la coautora Almudena Prieto.
Fotografía original
Crédito: ESO